29 de noviembre 2022
Miles de personas se están yendo de Nicaragua y sé que eso no te toma por sorpresa. Probablemente has visto muchos videos en redes sociales de cómo la gente se está aglomerando en las oficinas de migración y cada vez que querés hacer un trámite para renovar tu pasaporte o sacar un permiso de salida para menores, o para la razón que sea, se está volviendo casi IM-PO-SI-BLE por la cantidad de personas que están haciendo fila. Se escuchan historias de gente que duerme ahí y pasa toda la noche esperando para hacer fila, y cuando ya abren en la mañana, todos corren al mismo tiempo a ver quiénes encuentran lugar, porque no todos pueden ser atendidos el mismo día.
La migración siempre ha sido un constante en nuestro país y de hecho una parte –nada despreciable– del dinero con el que cuenta Nicaragua, viene precisamente de las remesas. Lo que pasa es que en los últimos años, sobre todo a partir de la crisis de 2018, después incentivado con la pandemia y ahora con esta nueva crisis económica que se está sintiendo, lo vemos todavía más palpable.
Hace unas semanas tuve una reunión con varios amigos que tienen negocios de diferentes tipos, industrias, tamaños.. y todos coincidían que tenían muchísimos trabajadores yéndose del país para Costa Rica y otros para Estados Unidos. Algunos de ellos se iban porque tenían un alto nivel de deudas y pensaban en marcharse para encontrar un trabajo que le pagará $20.00 la hora –aunque probablemente sea más parecido a 12 o 13 dólares la hora– trabajar allá arduamente, mandar dinero, pagar sus deudas y posteriormente regresar.
También hay otras personas que lo están haciendo porque quieren mejorar su nivel de vida. De hecho nosotros recientemente en el grupo privado que tenemos en Facebook que se llama “ElAhorro con Plata con Plática” lanzamos esa pregunta para sondear un poquito ¿cómo andamos pensando? ¿qué estábamos diciendo? ¿cuales son las razones detrás de querer migrar? y la razón número uno que salió, ni siquiera era por deuda, sino querer mejorar el nivel de vida y además nos pedían consejos… entonces este artículo va dirigido especialmente para ellos.
Cuando vi los resultados de esa encuesta lo primero que pensé fue: ¿qué es calidad de vida? Y yo creo que eso, al igual que las finanzas son personales, quizás la percepción que tenemos de calidad de vida, también es de cierta manera personal, porque algunas personas podrían valorar estrictamente lo monetario, es decir “¿cuánto yo gano? ¿cuánto me están pagando cada hora?” sin evaluar nada de lo demás.
He tenido la oportunidad de ver ambas caras del asunto, es decir, he tenido la oportunidad de hablar últimamente con personas que estaban viviendo en Estados Unidos, se vinieron acá y montaron un negocio y dentro de las cosas que mencionaron de la diferencia y de por qué les encantaba vivir aquí decían:
☑️ El ritmo de vida no es tan acelerado.
☑️ Tenés más tiempo para pasar con la familia.
☑️ Se puede comer mejor.
☑️ No hay tanta comida chatarra.
☑️ No es tan violento en términos de seguridad.
☑️ Podes ir más fácilmente a la playa, la laguna, o la montaña.
La otra cara es “me quiero ir allá porque para mi calidad de vida es ganar más dinero” y de nuevo no estamos tomando en cuenta qué más hay ahí.
He conocido la historia de personas que se van allá, y aunque efectivamente encuentran estos trabajos donde pagan más $12, $13 o $20 la hora, el costo de la vida es taaan alto que si querés mandar dinero aquí, o si tenes deuda o familia a la que tenés que ayudar, lo que les queda es para vivir en un apartamento con un espacio sumamente reducido –porque las rentas en Estados Unidos están carísimas en todos los estados– en un apartamento de 2 o 3 cuartos, con un solo baño, 12, 13 o 15 personas y están prácticamente hacinados si me lo preguntas a mí.
Entonces ¿cuál es esa calidad de vida? si no te da chance de cocinar porque tu tiempo es muy limitado y estás ganando dinero pero lo gastas comiendo fuera todo el tiempo y no comida cara o diferente a la de acá, sino comida chatarra porque tenés que continuar teniendo energía para seguir trabajando.
Antes de pasar a consejos financieros para poder irte, yo te invitaría a que te replantees qué es calidad de vida para vos, y después de que sepás que es eso, es momento de preguntarte si al irte: ¿vas a encontrar realmente esa calidad de vida? O si lo has estado viendo con un lente de miopía de por medio que solamente te permite observar el dinero que vas a ganar.
Mis consejos para hacerlos de la mejor manera:
Si ya estás decidido a irte por la razón que sea, si ya definiste calidad de vida, tenés demasiadas deudas o no encontrás trabajo en Nicaragua –que también es muy probable que esté sucediendo– algunas recomendaciones:
☝️ Averiguá lo mejor posible sobre el lugar al que vas a ir.
No te vayás a la loca y no lo hagás solo porque tu vecino se fue y ya te dijo que es “la última coca cola del desierto”. Entonces si ya definiste la ciudad en la que vas a estar, internet te va a ayudar a encontrar cuánto es el costo de la vida en esa ciudad. Y por costo de vida me refiero a la renta y qué porcentaje de tus ingresos va a requerir eso. ¿Cuánto te cuesta ir a hacer super una semana a ese lugar? ¿Cuánto te cuesta lavar tu ropa? ¿Cuánto vas a gastar en transporte? Y empezá a recopilar toda esta información de todos los costos y gastos que tenés en Nicaragua para pasarlo a ese nuevo país.
☝️ Con todos estos datos en mano, ahora te toca hacer un presupuesto.
Imaginá que ya estás viviendo ahí, que ya tenés uno de estos trabajos que te vendieron como “trabajo soñado” donde ganás $20.00 la hora, ¿cuánto significa al mes? Y preguntale a las personas que vos conocés si realmente están trabajando todos los días, si trabajan 5 o 7 días, o si solo encuentran trabajo 3 días, para que saqués cuántas horas y el mejor cálculo de los ingresos que vas a tener. Y a esos ingresos restale todos los gastos que tiene una persona normal: comida, vivienda, transporte, entretenimiento y lo que también tenés pensado qué vas a mandar de dinero, o si estás ahorrando para venir a poner un negocio a Nicaragua, o si tenés familia que mantener o ayudar, la razón que sea, debés presupuestarlo.
De lo contrario, te puede pasar que no te alcanza para mandar porque todo te lo gastás, o empezás por mandar ese dinero, que lo que te queda para vivir es taaan poquito que en lugar de estar en un lugar mejor, estarás en condiciones peores de lo que estabas en Nicaragua.
☝️ Ahora que ya tenés ese panorama, preguntate ¿cuánto necesitas para irte y de donde vas a sacar ese dinero?
Porque irse no es nada más teletransportarte y ya salís en la otra ciudad, tiene un costo. Ya sea que te vayas “mojado” –o en avión– y que luego te quedés ilegal, hay un costo ahí. Averiguá y pensá que por lo menos una semana vas a tener que mantenerte porque no vas a tener trabajo de manera inmediata.
Entonces, ¿cuánto dinero tenés ahorrado? Y si tu respuesta es nada, tenés que comenzar por reunir ese dinero. He visto muchos casos de gente que está pidiendo préstamos para poder hacerlo y si lo hacés así, vas a tener una deuda adicional cuando llegués. Lo ideal es irte con tu dinero para que lo hagás más tranquilo, por vos, y si tenés familia, por ellos también.
Pero si un préstamo es la única opción, agotá las opciones para que sea con la menor tasa de interés posible y no con prestamistas.
*Este artículo fue publicado originalmente en: Plata con Plática