20 de septiembre 2022
El presidente de Chile, Gabriel Boric, hizo este martes un llamamiento a “contribuir” con la liberación de los presos políticos de Nicaragua, y dijo durante su intervención en la 70° Asamblea General de las Nacionales Unidas que los problemas que aquejan a las distintas sociedades se solucionan con “más democracia y no con menos”.
Boric llamó “a realizar las acciones que sean necesarias, y no solo declaraciones, y poner fin al abuso de los poderosos en cualquier lugar del mundo, a seguir trabajando para contribuir a la liberación de los presos políticos en Nicaragua”.
Según datos avalados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), actualmente en Nicaragua hay más de 200 presos políticos, como producto de la crisis sociopolítica local.
La Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh) informó de un deterioro en el cumplimiento de los derechos humanos en Nicaragua en los últimos cuatro años, que incluyen atentados contra las libertades de expresión, reunión y movilización, además de acciones contra la prensa y la Iglesia católica, que han llevado al exilio a cientos de miles de personas, incluyendo cientos de periodistas y decenas de religiosos.
“El camino para enfrentar los problemas que aquejan a nuestras sociedades se pavimenta con más democracia y no con menos, incentivando la participación y no restringiéndola, fomentando el dialogo y jamás censurándolo y, sobre todo, respetando a quien piensa distinto", indicó el mandatario.
Boric, un exlíder estudiantil que el pasado diciembre se convirtió en el presidente más joven de la historia chilena, subrayó además que “tener opiniones distintas no nos vuelve enemigos”.
“Me rebelo contra el abismo que algunos pretenden cavar ante la legítima diversidad de opiniones. Desde Chile declaramos nuestra voluntad de constructores de puntos ante estas brechas que nos impiden encontrarnos como sociedades diversas”, añadió.
Situación chilena
El gobernante recordó que Chile optó por la democracia para solucionar el estallido social de 2019, la mayor ola de protestas desde el fin de la dictadura militar, con una treintena de muertos, miles de heridos y señalamientos contra las fuerzas de seguridad por violaciones a los derechos humanos.
Boric hizo un repaso así a los tres años que ha vivido Chile desde las revueltas y recordó que el pasado 4 de septiembre una abrumadora mayoría de chilenos (62%) rechazó en un plebiscito la propuesta de nueva Constitución redactado por una convención de tendencia progresista elegida tras las propuestas.
“Algunos han querido ver el resultado del plebiscito como una derrota para mi Gobierno. Nunca un Gobierno puede sentirse derrotado cuando el pueblo se pronuncia”, destacó.
El mandatario progresista alertó además de que ningún país está exento de sufrir una crisis social como la que vivió Chile en 2019 porque “la desigualdad es una amenaza latente para la democracia” y pidió anticiparnos a la “injusticia social”.
“Necesitamos una voz unida de América Latina, más trabajo conjunto desde el Sur global, unas Naciones Unidas modernizadas”, concluyó.