18 de julio 2022
AA
Share
El obispo auxiliar de la diócesis de Managua, monseñor Silvio Báez, reflexionó durante su homilía de este domingo sobre la urgencia del silencio y la oración en los fieles cristianos para no desviarse del camino al cambio social y la justicia.
“Los cristianos comprometidos en el cambio social necesitan detenerse, hacer silencio, entrar en sí mismos y escuchar a Jesús. Sin darnos cuenta, las luchas más generosas en favor de la justicia se pueden desvirtuar. Creyendo que luchamos por una nueva sociedad, en el fondo, podríamos estar buscando protagonismo”, dijo el religioso, quien se encuentra exiliado en Miami, Estados Unidos.
El religioso destacó que, en ese camino de ruido, muchas veces “gente generosa que lucha contra regímenes opresores, termina actuando con el mismo autoritarismo que pretende cambiar. Para los cristianos, no basta hablar y decir cosas. Hay que discernirlo todo a la luz de la palabra de Jesús, para tomar distancia de la realidad, examinarnos por dentro y purificar el corazón”.
- Lee: Monseñor Báez: "Los lobos quieren que la Iglesia sea como un grupo de corderos callados y ciegos"
La reflexión, parte del evangelio de San Lucas, capítulo 10, que describe el encuentro de Jesús con Martha y María en Betania, que una se desvive en los quehaceres por atenderlo; mientras la otra se sienta a escuchar su palabra.
Ante esa historia, monseñor Báez reflexionó que Jesús no quiere a sus hijos ocupados haciendo cosas sin sentido. “Debemos aprender a detenernos y hacer silencio, para escuchar al Señor”.
“Incluso los sacerdotes, si no dedicamos tiempo a la oración silenciosa para escuchar a Jesús, corremos el riesgo de volvernos simples funcionarios religiosos o administradores parroquiales, cayendo en un activismo estéril que nos va vaciando por dentro”, reflexiona.
Cardenal promueve campaña de oración
El cardenal, monseñor Leopoldo Brenes, aprovechó la homilía —donde participaron los cargadores de Santo Domingo— para iniciar una campaña de oración al Santo Rosario para la paz mundial y de la patria, previo a las fiestas patronales de Managua, que comienzan el primero de agosto.
“He pensado que hoy, junto a los cargadores aquí presente, lancemos una campaña de oración del Santo Rosario, de hoy hasta el 10 de agosto (...) una campaña de oración, rezar el Santo Rosario por la paz en el mundo, por la paz en nuestra Patria, por la concordia, la amistad, por la paz de nuestras familias y la paz de nuestros corazones”, dijo monseñor Brenes.
El cardenal explicó que esta jornada de oración los prepara “para esa manifestación del primero de agosto, pero esa manifestación será fuerte si está sostenida por la oración. Entonces tenemos que orar para que esa manifestación de amor, de cariño, de fe en Santo Domingo tenga toda la fuerza y transmita algo”.
El religioso destacó que el evangelio de este domingo invita a los fieles a la oración, “no significa que tenemos que dejar de hacer todas las cosas”, sino de detenerse y escuchar a Jesús.
El patrono de Managua, Santo Domingo de Guzmán, bajará de las Sierritas, por primera vez, tras dos años de suspensión de las fiestas debido a la pandemia de la covid-19. En años pasados, la Alcaldía de Managua hizo su propia celebración con "El Mocito" (una imagen sustituta) que realizó el mismo recorrido del santo original.
Obispos guardan silencio ante persecución
Los obispos guardaron silencio en sus homilías ante la reciente persecución que ha sufrido la Iglesia Católica de Nicaragua, que incluye el arresto y condena de dos sacerdotes y la expulsión de congregaciones religiosas.
Monseñor Jorge Solórzano, obispo de la Diócesis de Granada, que administra las parroquias de los sacerdotes encarcelados: Manuel García, de Nandaime, y monseñor Leonardo Urbina, de Boaco, realizó una breve reflexión sobre evangelio del domingo en la cual hace un llamado a la oración y la comunión con Dios.
- Régimen tenía “fichado” a monseñor Urbina como “azul y blanco”
- Condenan a cinco años de cárcel a supuesta víctima del sacerdote Manuel García
“Quiero dejarles algunas preguntas para que durante este día y la semana las reflexionemos: ¿priorizo en mi vida la escucha de la palabra de Dios? ¿Es la palabra de Dios quien inspira mis servicios? ¿Soy hospitalario para acoger al que lo necesita?”, dijo el obispo.
Y al final de la misa, se hizo lectura del pronunciamiento del Consejo Presbiterial de la Diócesis de Granada, que fue publicado este jueves con relación al arresto de los sacerdotes. En este se hace un llamado a jornadas diarias de oración y en las eucaristías se pida por la fortaleza espiritual de ambos religiosos. “El señor que nos llamó a ser miembros de su Iglesia, nos mantenga unidos en caridad y oración”, dice el comunicado.
