26 de junio 2022
A más de 420 kilómetros de Managua, Karelia de la Vega, conocida popularmente por su personaje, Lady Vulgaraza, sobrevive de la venta de cajetas de coco, leche y papaya. Este oficio lo aprendió desde niña y por generaciones le dio de comer a su familia en la comarca Pochocuape, de donde partió hacia Costa Rica el pasado 6 de junio de 2022 debido al acoso de la policía del régimen.
“Ha sido bastante difícil, pero yo estoy tratando de salir adelante con la venta de dulces tradicionales, de la mano de una señora que me dio la oportunidad de venderlas en su negocio. Ahorita solo vendo tres tipos de cajetas, pero pretendo extender la elaboración de cajetas ”, dice vía telefónica desde San José, Costa Rica, Karelia, mujer trans de 28 años.
Karelia confiesa que han sido semanas difíciles porque no estaba preparada para el exilio --llegó a Costa Rica solo con 30 dólares--, pero ahora su familia goza de un poco de tranquilidad. “Ya no están con el pensamiento de que me vayan a echar preso”, explica.
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Según cuenta, días antes de que se conociera públicamente que había salido del país, llegaban oficiales de la policía afuera de su casa -donde tiene un comedor infantil para los niños de la comunidad--, pero después de eso ya no volvieron. Por ahora, su propósito es ampliar su venta de dulces y apoyar a su mamá, quien es de la tercera edad.
“Yo quiero recoger dinero y con eso iniciar, ganarme la vida como lo hacía en Nicaragua, ya sea en las calles o en algún lugar en el que alguien me dé un espacio. Vender esos dulces tradicionales que hacía en Nicaragua, tal vez no la misma cantidad que hacía en Nicaragua, pero sí para sobrevivir”, cuenta.
Tiktoker busca empleo, mientras sobrevive haciendo nacatamales
Kevin Monzón, de 21 años, vive una situación parecida a la de Karelia. Ante la falta de trabajo, sobrevive de la venta de nacatamales en Costa Rica, un oficio que apenas le alcanza para sobrevivir, mientras espera una oportunidad de trabajo.
“Ahorita estoy pasándolo mal. A veces como, a veces no y así voy. He metido bastantes papeles en los superes de los chinos, pero nada que ver, es muy complicado. Está topado eso de nicaragüenses. Lo que hago es vender nacatamales los jueves, viernes, sábados y domingos. Por medio de eso he sobrevivido”, señala Monzón, quien se volvió popular en Nicaragua por sus videos confrontativos al régimen en la plataforma Tik Tok, .
Sin embargo, confiesa que aunque logre vender todos los nacatamales, la ganancia es poca porque Costa Rica es un país caro. “Aquí el dinero no es nada. Mil colones no son nada”, lamenta.
Ante esta dura situación, el joven ha pensado en regresar, pero el temor de ser arrestado y causarle sufrimiento a su familia lo detienen. “Mi vida corre peligro”, dice el joven que cuenta con medidas cautelares de parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Monzón cuenta que al llegar a Costa Rica sufrió de depresión por separarse de su país y de su familia. Su salud física también se deterioró bastante y tuvo que ser llevado a una clínica. “Antes de venirme yo siempre fui sano, no me enfermaba; pero a penas llegué caí en depresión y después hasta me llevaron al hospital porque sufrí de inflamación al colón, fue dolorosísimo y caro”, cuenta y explica que gracias al Colectivo Nicaragua Nunca Más pudo recibir atención psicológica.
Ahora se encuentra mejor de salud, pero las carencias y los problemas continúan. Recién se enteró que su mamá tiene hígado graso y un tumor. “Para mí fue un golpe muy duro. Yo hablo con ella todos los días y le digo que estoy bien para no preocuparla”, dice Monzón.
**Si desea ayudar a Karelia de la Vega o Kevin Monzón puede comunicarse con ellos a través de sus redes sociales**