25 de junio 2022
El Ministerio de Energía y Minas y el Instituto Nicaragüense de Energía informaron este viernes que el precio de los combustibles y del gas licuado en Nicaragua se mantendrá congelado por doceava semana consecutiva, según una disposición del Gobierno de Daniel Ortega.
“De acuerdo con los precios internacionales de los combustibles, para la siguiente semana (del 26 de junio al 2 de julio 2022) el precio de la gasolina súper debería incrementarse en C$ 48.92 por galón, la gasolina regular en C$ 30.69 y el diésel en C$ 44.57”, describen.
Por lo tanto, el precio de los combustibles se mantendrá en 185.35 córdobas el galón de gasolina super y regular en 180.96 córdobas, mientras el del diésel en 163.54 córdobas.
En el caso del gas licuado de petróleo, el principal combustible que se usa para la preparación de alimentos, se mantendrá en su precio en las presentaciones de 10, 25 y 100 libras que, según Instituto de Defensa del Consumidor (INDEC), es de C$ 180 en cilindro más pequeño, C$ 436 el de 25 libras y de C$ 2004 el más grande.
“Nuestro Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional en lo sucesivo, continuará en seguimiento permanente del comportamiento de los precios internacionales y resto de variables que conforman el precio de los combustibles, y se tomarán las acciones y medidas correspondientes que permitan mitigar el impacto del incremento de estos precios en la economía de las familias nicaragüenses”, aseguraron en una nota de prensa.
En mayo pasado, Ortega reveló que mantener el subsidio de los combustibles de una semana significaba al país cuatro millones de dólares y este costo habría aumentado desde entonces, superando los USD 48 millones a junio de 2022.
Millonario préstamo para subsidio de combustibles
El Gobierno de Ortega no ha dejado claro cuáles son los mecanismos que aplican para seguir subsidiando los incrementos de los precios internacionales del petróleo, cuál es el origen de esos fondos y qué programas se están afectando.
El pasado 18 de mayo, Ortega habló sobre un reajuste en el Presupuesto General de la República para concentrar “los recursos” para garantizar que los combustibles, el gas, la energía eléctrica y el agua no incrementen. Se desconoce el detalle de dónde se ha aplicado esta política de ahorro.
“Se necesitan cuatro millones, cinco millones, seis millones de dólares cada semana para mantener congelados (los combustibles), y gracias a Dios hasta el momento ha funcionado esa política (de ahorro)”, dijo el mandatario.
Este miércoles 22 de junio, el régimen autorizó al Ministerio de Hacienda y Crédito Público suscribir un préstamo por 200 millones de dólares para cubrir el subsidio a los combustibles. Esta línea de crédito había sido ofrecida por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), que destinó un préstamo aditivo de USD 800 millones para todos los países miembros de la región.
“El actual incremento de los precios del petróleo se suma a los efectos negativos que la pandemia de la covid-19 generó en la economía, desalineando la oferta y la demanda mundial a través de la interrupción de las cadenas de suministros”, dijo el presidente ejecutivo del BCIE, Dante Mossi.
De acuerdo al banco, cada país miembro del BCIE dispone de una línea de crédito de 200 millones de dólares, sin embargo, esta podría “incrementarse en función de la participación de fuentes externas de recursos según sus respectivos lineamientos”.