20 de mayo 2022
El obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí, monseñor Rolando Álvarez, denunció la noche del jueves 19 de mayo que la Policía bajo el dominio del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo lo persiguió durante todo el día, incluso invadiendo la casa de sus familiares. Un día después, este viernes, la parroquia Santo Cristo de Las Colinas, donde se encuentra refugiado, permanece bajo asedio policial.
"Hoy (jueves) he sido perseguido durante todo el día por la Policía sandinista, desde la mañana, hasta estas horas de la noche. En todo momento, durante todos mis movimientos del día", empezó contando en un video publicado en la página de Facebook de la Diócesis de Matagalpa.
El religioso narró que "al final de la tarde" cuando se encontraba en la casa de una sobrina les cuestionó a los oficiales de la Policía por qué lo perseguían y le respondieron que "ellos obedecen órdenes".
"También les dije que se comunicaran con el primer comisionado (Francisco Díaz, jefe de la Policía Nacional), para informarle que ya por hoy, era suficiente esta persecución, y que esperaba, después de cenar en casa de mi sobrina, que ellos también pudieran estar descansando", detalló.
Sin embargo lamentó que "lejos de suceder, lo que realmente creí, que con una básica voluntad o mínimo sentido común de parte de las autoridades superiores de la Policía y del Gobierno iba a suceder, realmente, lo que aconteció fue lo contrario: entraron en mi círculo de privacidad familiar".
"Llegaron a mi casa privada, familiar, paternal, maternal, poniendo en riesgo la seguridad de mi familia. Entonces, me regresé a la parroquia del santo Cristo de Esquipulas, aquí en Las Colinas, dónde quiero agradecer a monseñor Carlos Avilés, que me ha dado hospedaje, y me ha acogido como huésped en esta parroquia", expresó Álvarez.
Inicia ayuno hasta que cese hostigamiento
El obispo afirmó que desde anoche comenzó "un ayuno a agua y suero indefinido hasta que la Policía Nacional, a través del presidente o del vicepresidente de la Conferencia Episcopal, únicamente, me haga saber que van a respetar mi círculo de privacidad familiar".
"Ellos me han hecho saber en uno de los semáforos de la carretera a Masaya, en donde me detuve para preguntarles nuevamente qué pasaba (con la persecución) y me contestaron que era por mi seguridad, pero ya sabemos precisamente, que la inseguridad en este país, es por la Policía. Es decir: los que nos hacen sentir inseguros con esta persecución, son ustedes, hermanos policías", expresó el jerarca católico.
Álvarez invitó al pueblo católico de Matagalpa y Estelí "y a todos los que quieran unirse a mí en este ayuno indefinido, que lo hagan", a partir de hoy, yendo a las parroquias de las dos Diócesis "que en este momento estoy pastoreando, que en donde los párrocos se los permitan, a adorar al Santísimo, a orar, a cantar, a alabar al Señor, y a ayunar por el tiempo que ustedes así lo consideren conveniente".
"También a hacer vigilias, unido a este servidor. Yo estaré en oración. Estaré haciendo exorcismo desde aquí, estaré orando. Estaré ante el Santísimo, celebrando la eucaristía. Estaré elevando mis súplicas al Señor, para que pueda cesar está situación de hostigamiento durísima y cruel para todos nosotros", concluyó diciendo en el video.
El obispo auxiliar de Managua, monseñor Silvio José Báez, manifestó su solidaridad y su "cercanía fraterna" con Álvarez "quien está siendo hostigado por la Policía".
#Nicaragua. Le ofrezco mi solidaridad y mi cercanía fraterna a mi hermano, Mons. Rolando Álvarez, Obispo de Matagalpa, quien está siendo hostigado por la Policía. Me uno a su oración, pidiéndole al Señor que lo proteja con la fortaleza de su Espíritu.
👉🏻 https://t.co/36xcNwdf9y pic.twitter.com/wCZLy4lFCp— Silvio José Báez (@silviojbaez) May 20, 2022
"Me uno a su oración, pidiéndole al Señor que lo proteja con la fortaleza de su Espíritu", publicó en su cuenta de Twitter.
Álvarez declaró este viernes al portal Artículo 66 que lo que está ocurriendo es "una persecución evidente" e "intimidación" pretendiendo "que la Iglesia deje de hablar".
Manifestó que este hostigamiento no es nuevo, porque sufre "una tomadera de fotos" cada vez que sale a las calles y que se mantendrá también de forma "indefinida" en la parroquia del santo Cristo de Esquipulas en Las Colinas.
"Lo que me sucedió a mí es persecución, es hostigamiento (…) elevaron la escala a un nivel que realmente yo no me imaginaba que iban a hacerlo", apuntó.
Persecución contra religiosos
El hostigamiento y la persecución policial por parte del régimen en contra de religiosos de la Iglesia católica se ha intensificado en la última semana. El padre Harving Padilla, de la parroquia San Juan Bautista de Masaya, ha denunciado que desde el pasado 15 de mayo, el régimen le tiene impuesta “parroquia por cárcel”, pues está cercado por policías y paramilitares.
“Ellos (policías) dicen que puedo salir a la hora que quiera, pero cómo voy a salir estando inseguro, con esas personas ahí, cuál es la seguridad que uno puede sentir cuando constantemente personas de civil están ahí apostadas, personas que sabemos son paramilitares, agresivos, y para evitar que ellos tengan algún confrontamiento conmigo prefiero no salir. Tengo parroquia por cárcel”, apuntó el religioso en entrevista con el programa Esta Noche.
El miércoles 18 de mayo el sacerdote Uriel Vallejos, párroco de la parroquia Divina Misericordia de Sébaco, denunció ser víctima de hostigamiento policial.
“Agentes de la Policía Nacional que se encuentran en una caseta afuera de la Nunciatura (Apostólica), tomaron fotografías y luego esperaron que saliera y estaban otros agentes, quienes pidieron documentos al conductor, y luego me exigieron presentar mis documentos personales, a lo cual me opuse porque no conducía”, denunció el religioso a través de las redes sociales de la parroquia.
Seguirán "denunciando" y "acompañando al pueblo"
La Comisión de Justicia y Paz de la Arquidiócesis de Managua se pronunció este miércoles ante la oleada represiva y las intenciones del Estado por encarcelar a los sacerdotes por supuesta “traición a la patria”. En un comunicado publicado en sus redes sociales, los obispos enfatizaron que seguirán denunciando “las estructuras sociales de pecado” y acompañando a los nicaragüenses más pobres y débiles.
“La Iglesia seguirá anunciando el Evangelio, denunciando las estructuras sociales de pecado, acompañando al pueblo, especialmente a los pobres y los débiles. La misión de la Iglesia siempre provocará contradicciones en este mundo donde junto a la luz también existe la oscuridad del mal”, sentencian.
El pasado 4 de mayo, diputados sandinistas integrantes de la Comisión de Justicia y Asuntos Jurídicos, y la Comisión de la Paz, Defensa, Gobernación y Derechos Humanos de la Asamblea Nacional discutieron, entre otros asuntos, que “los religiosos y directores de organizaciones de derechos humanos que se involucraron en la aventura golpista” deberían ser juzgados.