3 de mayo 2022
La nueva apuesta del régimen orteguista para ocupar el cargo de secretario general del Sistema Integración de Centroamérica (SICA) es Orlando Solórzano Delgadillo, antiguo titular del Ministerio de Fomento, Industria y Comercio (Mific), conoció CONFIDENCIAL.
Solórzano fue removido de su cargo al frente del Mific el primero de marzo de 2022, supuestamente por problemas de salud, tras 15 años al frente de esta cartera estatal.
Nicaragua tiene asignada la Secretaría General del SICA para el período 2021-2025, basados en un acuerdo de los presidentes centroamericanos en 2017, en una reunión en San José, Costa Rica. La declaración establece que cada país se turnará la Secretaría General, guiados por el principio de rotación geográfica.
El portal digital Expediente Público reporta que este martes 3 de mayo se reunirán los cancilleres de la región centroamericana para abordar la propuesta del régimen orteguista, pero este encuentro no estaría confirmado por las representaciones oficiales.
Fuentes vinculadas a la diplomacia de Costa Rica señalan que el Gobierno saliente de Carlos Alvarado no votaría por el candidato de Ortega.
Además, comentaron que Costa Rica no tomará ninguna postura sobre el tema hasta después de la toma de posesión del presidente electo Rodrigo Chaves, el próximo 8 de mayo. CONFIDENCIAL consultó al Ministerio de Relaciones Exteriores de Costa Rica, pero aún no hay respuesta.
Este viernes 29 de abril, Chaves declaró que actualmente “está reconsiderando” la posibilidad de nombrar un embajador en Nicaragua, luego de la ocupación ‘manu militari’ y posterior confiscación de la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Managua.
Tercer intento por colocar un allegado en el cargo
La postulación de Solórzano sería el tercer intento del régimen orteguista por colocar a alguien leal en el cargo, luego que las dos propuestas anteriores fueron rechazadas por la mayoría de los países de la región.
Primero, el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo propuso que el último secretario general, el expresidente guatemalteco Vinicio Cerezo, señalado de simpatizar con el orteguismo, se mantuviera en el cargo, pero la propuesta fue rechazada por Belice.
El diario La Nación de Costa Rica publicó que la Cancillería de Belice envió el 22 de junio de 2021 una comunicación diplomática a San José, donde recuerda que el Protocolo de Tegucigalpa —documento fundacional del SICA— “no contempla la extensión del mandato” del secretario general.
“(Belice) agrega que el espíritu de aquel acuerdo (de 2017) fue que el secretario general debe ser de la nacionalidad del Estado miembro a quien le corresponde proponer candidatos”, según la publicación.
La terna de fichas del régimen rechazada por Centroamérica
Posteriormente, el régimen propuso a una terna de candidatos para ocupar la Secretaría General del SICA: el exguerrillero sandinista Orlando José Tardencilla, quien recientemente tuvo un paso fugaz como representante de Nicaragua ante la OEA; la arquitecta Luz Marina López Escobar y María Amelia Coronel Kinloch, quien desde 2017 funge como titular del Ministerio de Gobernación (Migob).
Sin embargo, esta terna fue rechazada debido a que los países integrados en el SICA argumentaron que la terna propuesta por Nicaragua estaba integrada por “personas sin muchos conocimientos” en el servicio exterior, y “muy allegadas al régimen”.
Debido al rechazo a las propuestas de Nicaragua, Guatemala ocupa la presidencia ‘pro tempore’ del SICA. El 16 de diciembre de 2021 estaba programada una reunión de jefes de Estado de la región, pero esta se canceló porque solamente Daniel Ortega y el entonces presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, confirmaron su asistencia.
Actitud política de Nicaragua podría trabar candidatura de Solórzano
Un exdiplomático, quien pidió no ser citado para no enfrentar represalias de la dictadura orteguista, explicó que la candidatura de Orlando Solórzano y su falta de experiencia diplomática no es en realidad el verdadero problema para llegar a un consenso para designar al nuevo secretario general del SICA, sino la naturaleza política con la que actúa el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
"La trayectoria profesional de Solórzano al frente del Mific indiscutiblemente lo hace un candidato más aceptable, si se tratase simplemente de un problema de falta de calificación profesional de los candidatos. Pero el problema es de naturaleza política, mucho más complejo. En primer lugar, Nicaragua bajo el Gobierno Ortega-Murillo ha violado y continúa violando los principales tratados de la integración centroamericana, en particular el Protocolo de Tegucigalpa y el Tratado Marco de Seguridad Democrática en Centroamérica", señaló.
"Dichos tratados contienen numerosas disposiciones sobre democracia, elecciones periódicas libres y respeto a los derechos humanos, a las que se han comprometido los Estados signatarios. En segundo lugar, la vocación totalitaria de los Ortega Murillo y su total falta de escrúpulos, hacen que cualquier elección de un candidato propuesto por Nicaragua sea vista como la elección de un títere al servicio de la dictadura nicaragüense", añadió.