25 de abril 2022
La red de médicos y voluntarios del Observatorio Ciudadano Covid-19 advirtió que la población de Nicaragua “comienza a confiarse” en la prevención de la pandemia del nuevo coronavirus, que en los últimos dos años dejó entre 14 800 y 33 400 fallecidos en el país, según estudios de sobremortalidad.
“Dado que en los países del mundo se ha dado una relajación de las medidas de protección, en Nicaragua la población comienza a confiarse. No obstante, no hemos alcanzado los niveles de inmunización aconsejables para confiar en disminuir las medidas de protección”, indicó el Observatorio.
Esta semana, el Gobierno de Brasil anunció el fin del estado de emergencia sanitaria, España y El Salvador retiraron la obligatoriedad de usar mascarillas en espacios públicos y en Estados Unidos se anunció que ya no es necesario usar mascarillas en los aviones. Asimismo, varios países de la región anunciaron que ya no pedirán pruebas negativas de covid-19 como requisito de entrada.
En Nicaragua el Estado nunca impuso medidas restrictivas, pero la población comenzó a usar de forma voluntaria ante el paso de la pandemia. Sin embargo, en los últimos meses se ha reducido el uso de cubrebocas y se realizan actividades sin distanciamiento social.
“Nos hemos apresurado a dar por hecho que también hemos alcanzado la normalidad y por lo tanto podemos dejar de lado las medidas de protección”, advierte el Observatorio.
Según datos del Ministerio de Salud (Minsa) compartidos a la Organización Panamericana de Salud (OPS), hasta el 22 de abril de 2022, Nicaragua alcanzó el 65.6% de su población vacunada con el esquema completo. Sin embargo, las últimas estadísticas oficiales revelaron que la población de la Costa Caribe, las más pobres y vulnerables, tenían los índices más bajos, en estas regiones menos de 30% de sus habitantes había completado el esquema de dos dosis.
A pesar de esto, el Gobierno de Daniel Ortega ejecuta un nuevo ciclo de vacunación en la población que ya fue vacunada en 2021. Según dijeron el pasado jueves, en lo que va de 2022 más de 1.1 millones de personas mayores de dos años fueron vacunadas.
OPS recomienda seguir usando mascarillas
La directora de la OPS, Carissa Etienne, señaló este miércoles que todavía no ha llegado “el momento de bajar la guardia” y que, de acuerdo con la reciente decisión de Comité de Emergencias de la OMS, la covid-19 sigue "siendo una contingencia de salud pública de importancia internacional".
“Seguimos en la fase en la que necesitamos esforzarnos para acabar con este virus, tratar a las personas y seguir vacunando”, dijo.
El doctor Ciro Ugarte, director de Emergencias de la OPS, señaló que “aún no hemos alcanzado como región y como mundo los niveles que necesitamos para que este virus no siga causando casos y muertes (…) La única manera de acabar con esta fase aguda es lograr una cobertura alta de vacunación, mantener la vigilancia y contar con un buen manejo clínico”.
Desinformación dificulta vigilancia epidemiológica
En su informe, el Observatorio Ciudadano denuncia que en Nicaragua es difícil realizar la vigilancia epidemiológica por el nivel de desinformación que se promueve desde el Estado. Ellos que han llevado un conteo independiente de los casos y muertes sospechosas, se han visto afectados por el temor de la población a represalias por parte del Gobierno de Nicaragua y la aparente “normalización” de la situación de la pandemia.
“En Nicaragua no existen las condiciones para que funcione adecuadamente la vigilancia epidemiológica de la covid-19, porque el Minsa tiene el monopolio centralizado de las pruebas diagnósticas y no se ha aprobado la importación de otras pruebas”, señalan.
Asimismo, denuncian que en la vacunación también ha imperado la desinformación. “No se sabe con certeza cuántos vacunados hay ni qué vacuna recibieron ¡Ni siquiera sabemos el estado de certificación de ellas! Esta situación de desinformación permite la circulación de incontables rumores que no siempre ayudan a los esfuerzos de inmunización”, afirman.
En este escenario, los voluntarios concluyen que el virus y sus variantes siguen circulando, por lo cual la población debe asumir su propio riesgo. “Ante el desconocimiento de la situación real de la pandemia en el país, es mejor continuar protegiéndose”.
Con información de EFE