29 de marzo 2022
Fuentes vinculadas a la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ) de la Policía Nacional confirmaron a CONFIDENCIAL que este lunes 28 de marzo, los presos políticos realizaron una protesta en sus celdas en la cárcel El Chipote.
En horas de la mañana "hubo gritos, consignas, y los presos cantaron el himno nacional en varios pabellones", dijo la fuente.
La protesta ocurrió cuando la mayoría de los presos políticos ya han sido condenados a penas que van de ocho hasta trece años de cárcel, y sin embargo, los jueces no han determinado cómo y dónde cumplirán la condena, y los mantienen bajo un régimen de aislamiento en una cárcel que supuestamente es para realizar "investigaciones".
Las fuentes relataron que en la protesta participaron mujeres y hombres, reos de conciencia ubicados en pabellones separados. Los presos demandaron "que los pongan en libertad y gritaron el nombre del general en retiro Hugo Torres", quien murió en un hospital como preso político bajo custodia policial.
Entre los presos políticos condenados se encuentran varios de la tercera edad que padecen de enfermedades crónicas, como Pedro Joaquín Chamorro (70 años), Violeta Granera (70 años), Víctor Hugo Tinoco (69 años), Nidia Barbosa (66 años), Dora María Téllez (66 años), Harry Chávez (64 años), Evelyn Pinto (63 años), Irving Larios (63 años) y José Adán Aguerri (60 años) y sus familiares demandan que se aplique la ley que permite que sean trasladados al régimen de arresto domiciliario.
Otros presos y presas demandan que los trasladen a la cárcel Modelo y a La Esperanza, y que cese el régimen de aislamiento y tortura en que se encuentran sometidos en el Chipote.
Las fuentes de la DAJ no revelaron cómo reaccionaron las autoridades policiales de El Chipote ante la protesta de los presos, cuyos familiares han denunciado tratos crueles, y si fueron sometidos a un régimen de castigo como represalia por los gritos y consignas. "Solo puedo decirle que hubo varias protestas en distintas horas de la mañana, pero no sé qué pasó después", dijo la fuente.
En las cárceles de El Chipote, las presas políticas Tamara Dávila, Dora María Téllez, Ana Margarita Vijil y Suyen Barahona, han sido mantenidas en celdas de confinamiento solitario durante más de nueve meses, mientras que los presos que comparten celdas con otros compañeros o compañeras, son obligados a mantenerse en silencio, y ninguno tiene acceso a libros, cuadernos, lápices o materiales de lectura.
Denuncian tratos inhumanos
Organizaciones de derechos humanos han denunciado las condiciones infrahumanas en que se encuentran los presos políticos, en violación a las llamadas “reglas Mandela”, o reglas mínimas establecidas por Naciones Unidas para el tratamiento de reclusos.
Esta es la primera vez que los presos políticos —capturados en el contexto electoral de 2021—protestan en la cárcel, puesto que el aislamiento y las condiciones precarias en que se encuentran les ha causado un serio deterioro físico y emocional, según han relatado sus familiares después de las seis veces que les han permitido visitarlos.
Defensores de derechos humanos han denunciado que el régimen incumple la ley, ya que en el artículo 130 del reglamento de la Ley 473, Ley del Régimen Penitenciario y Ejecución de la Pena, se establece que la periodicidad de las visitas familiares y conyugales para los internos ubicados en los diferentes regímenes será de cada 21, 14 y ocho días.
Durante la última visita a los presos políticos, ocurrida entre el 17 y el 20 de marzo, sus familiares denunciaron que hubo un posible brote de coronavirus en la prisión, los reos están con problemas de la vista y hongos en la piel y el régimen continúa torturándolos.
A los reos de conciencia tampoco se les permite materiales de lectura, fotografías, ni ropa de cama, por lo que aguantan frío durante las noches y mucho calor durante el día.