31 de enero 2022
Autoconvocados e integrantes de diferentes organizaciones de exiliados nicaragüenses en Costa Rica, protestaron y convocaron a un “boicot” contra la empresa de transporte Nicabus, en un plantón realizado el domingo, en las afueras de la terminal 7/10 en San José, luego que su propietario; Enrique Quiñónez, emitió un fuerte “discurso de odio” contra los más de 170 presos políticos que mantiene en Nicaragua el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
En su programa Choque de Opiniones, transmitido en Radio 800, Quiñónez se refirió a algunos reos de conciencia como “tostones” (homosexuales) y llamó “brutos” a los parientes que no firmaron el pronunciamiento realizado la semana pasada por familiares de presos políticos, que pidieron el apoyo del Gobierno, de las fuerzas vivas del país y de la Iglesia, para “un proceso de unificación ciudadana”.
También dijo que si se quiere “ver libre” a los presos políticos que están en el Chipote se tendrá que hacer “el llamado a levantar las sanciones”.
Algunos de los integrantes de organizaciones de exiliados como el Congreso de la Unidad de Nicaragüenses Libres, de Juntos por Nicaragua y del Movimiento de Occidente estuvieron desde la 1:00 p. m. hasta las 3:00 p. m. del domingo llamando a quienes se acercaban a la terminal de Nicabus a que “no usaran ese transporte por ser colaboracionista con el régimen de Ortega”.
El excarcelado político Róger Martínez, psicólogo que actualmente está exiliado en Costa Rica, explicó a CONFIDENCIAL que el llamado se hace en manifiesto a las declaraciones donde Quiñónez “hizo mofa de los presos políticos en Nicaragua”, puesto que “generó la indignación de los exiliados en Costa Rica y surgió en grupos de WhatsApp la idea de hacer un plantón en el negocio de este individuo”.
“Es un boicot al negocio Nicabus, invitando a las personas a que no hagan uso de esa línea de transporte, que hay otras líneas que transitan Nicaragua y Costa Rica, que no se prestan al juego de la dictadura en Nicaragua”, indicó.
Quiñónez amenaza con cárcel
Previo al plantón, Quiñónez -a través de su programa radial- señaló que el ciudadano Jimmy Guevara y “otro” fueron los que “comenzaron la campaña contra Nicabus”, calificándolos de “cobardes” y asegurando que “nunca se ha burlado del pueblo” y que, por el contrario desde hace algunos años “vienen sumando calumnias” contra su empresa.
“Los que van a ir que vayan... si me desean mal Dios se los va a multiplicar y a la hora llegada espero que tengan sus papeles bien… porque si no puedo llevarlos a juicio en Costa Rica los espero aquí en Nicaragua”, indicó en el programa del viernes pasado.
Agregó que “todo tiene su límite y esto bajo las amenazas de muerte y de perjudicar la empresa de Nicabus en Costa Rica tiene su límite, y mi contestación es, si se mete a la cocina después no se quejen de que hay mucho calor porque yo estoy metido cocinando”.
En el programa de este lunes, 31 de enero, Quiñónez volvió a referirse a la campaña de boicot y la protesta que hubo en Costa Rica contra Nicabus, expresando -contrario a lo denunciado en el plantón- que él no ha amenazado al ciudadano Jimmy Guevara, aunque advirtió que “en los próximos días iremos al Ministerio Público, o sea a la Fiscalía General de la República, para presentar una acusación formal contra las amenazas en contra de la empresa Nicabus, no de Enrique Quiñónez nada más”.
Mencionó que sus abogados en Costa Rica también tienen una serie de documentación y que “ya hay un archivo en la OIJ (Organismo de Investigación Judicial)”.