12 de enero 2022
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La variante de preocupación ómicron está a punto de convertirse en la cepa más predominante. Según informó la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ya circula en 43 países y territorios de las Américas, que incluyen tres países centroamericanos: Costa Rica, Panamá y Guatemala.
A esta lista de países podría sumarse Honduras, que en la última semana de diciembre informó que estudia casos sospechosos de esta variante. Nicaragua no ha informado sobre la búsqueda de esta variante, pero la OPS confirmó este miércoles que el país tiene capacidad para identificarla.
“Nicaragua ha generado un sistema de vigilancia genómica que le ha permitido demostrar la circulación de las variantes, tanto de interés como de preocupación, por lo tanto tiene la capacidad para identificar la variante ómicron”, dijo doctor Sylvain Aldighieri, gerente de Incidente para covid-19 de la OPS.
Sin embargo, Nicaragua apenas informó a la OPS sobre la circulación de las otras cuatro variantes; alfa, beta, gamma y delta en noviembre pasado, cuando recién bajaba la segunda ola de covid. Mientras, a nivel nacional no presentó ningún informe ni brindó detalles sobre el impacto de estas en el país. Y mientras los otros países reportan un incremento de casos en las últimas semanas, las cifras de contagios oficiales cada vez disminuyen. En la última semana se reportaron 39 casos y una muerte a nivel nacional.
En paralelo a esto, médicos independientes reportan pacientes con síntomas sospechosos de ómicron. Varios de estos recién llegaron a Nicaragua procedentes de países donde ya hay contagios comunitarios de ómicron y han contagiado a varios miembros de su familia. Estos casos sospechosos presentan irritación en la faringe, congestión nasal, tos seca, fatiga y dolor muscular, principalmente en la espalda baja.
Ómicron evade respuesta autoinmune
Los estudios sobre ómicron demuestran que esta cepa es más contagiosa que el virus original y las otras cuatro variantes; pero, es menos grave. Sin embargo, la OPS recomienda no subestimar el contagio porque ómicron ha mostrado gran capacidad para evadir la protección inmunológica creada por las vacunas y por la infección previa del SAR-CoV-2.
Además, explica la OPS, “aunque ómicron no genera una enfermedad más letal y las hospitalización o muertes en pacientes vacunados completos son mínimas. No se trata de verla como una simple gripa. Es importante tener en cuenta que hay muchas personas que no han recibido la vacunación completa por lo cual una infección de ómicron puede ser grave”.
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Ómicron tiene más mutaciones que las otras cepas. En total se conocen 50, pero de estas 30 están localizadas en la Proteína S y la otra parte en la unión al receptor que es una zona importante porque es la puerta de entrada del virus. Además que el período de infección es de cuatro días.
Según un estudio realizado en Qatar, que analizó el comportamiento de las cinco variantes del SAR-CoV-2 sugiere que “la protección brindada por una infección previa para prevenir la reinfección sintomática con alfa, beta o delta era sólida; mientras que contra la reinfección con ómicron fue menor, de casi el 60 %”.
La OPS afirmó que las pruebas PCR y de antígeno siguen siendo efectivas para detectar esta variante por eso recomienda a los países continuar utilizando los protocolos que ya existen y usar de forma racional estas pruebas.
Asimismo, explica que las únicas variantes de preocupación que se conocen son alfa, beta, gamma, delta y ómicron. No existe una cepa “deltacron”. “Aunque puede haber casos de coinfección o de codetección de las dos variantes, en ese momento no se ha demostrado que este fenómeno ha ocurrido y se está investigando si los reportes que circulan se deben a una contaminación en los laboratorios”.
Variante detona nuevas olas en Centroamérica
El primer caso de ómicron en Costa Rica se identificó el 19 de diciembre de 2021, en un paciente menor de edad que viajó a Estados Unidos con su familia. Desde entonces el vecino país ha mostrado un incremento de contagios detonando una cuarta ola.
"Iniciamos con fuerza inusitada el ascenso de la cuarta ola, motorizada sin duda alguna. Ómicron ha estado rondando por el país desde al menos hace tres semanas y sus efectos serán más notables en los días por venir, dada su altísima actividad de contagio, disminución del periodo de incubación y patogenicidad", dijo el epidemiólogo Ronald Evans, coordinador del informe semanal de la pandemia de la Universidad Hispanoamericana.
En Panamá, que identificó el primer caso el 20 de diciembre de 2021, y al igual que Costa Rica detonó un incremento de contagios al punto de desplazar a delta y volverse la más predominante. Las infecciones diarias se han triplicado y el viernes pasado este país superó la cifra de 5000 casos por día que habían alcanzado en enero de 2021, cuando enfrentaban la segunda ola.
El ocho de enero de 2022, Guatemala confirmó la circulación de esta variante después de enviar 89 pruebas de la covid-19 de guatemaltecos a Panamá, ya que en el país no se cuenta con la tecnología para detectar a ómicron. Estas pruebas fueron tomadas entre el 4 al 26 de diciembre de 2021 y del total de test, el 64% dio positivo a ómicron y el resto a delta, lo cual indica que la variante circulaba en este país desde ese mes.
Según el registro diario de contagios, desde finales de diciembre Guatemala ha registrado un incremento de infecciones diarias de covid-19, que estarían relacionadas a la nueva variante.
Por su parte, las autoridades de Honduras informaron que es posible que la variante ómicron circula en este país desde mediados de diciembre porque han visto varios casos con los síntomas de ómicron. Sin embargo, aún no ha logrado confirmar la circulación de esta.
De Nicaragua no hay información sobre las variantes y a diferencia de otros países, el porcentaje de vacunación completa es bajo. Según la última actualización apenas se ha logrado vacunar al 45% de la población, que es un gran avance considerando que el país se ubicó por debajo del 10% la mayor parte de 2021, sin embargo, la mayoría de la población no tiene la protección completa que ofrecen las segundas y terceras dosis. Por lo cual, esta nueva variante podría detonar el desarrollo severo de la enfermedad.
