15 de octubre 2018
El régimen de Daniel Ortega demostró su “ilegalidad” y “brutalidad” al apresar masivamente a 38 personas que participaban en un plantón realizado en el sector de Camino de Oriente, amparados en el derecho constitucional de la libre manifestación, incluso en un espacio privado, considera Azahálea Solís, miembro de la Unidad Nacional Azul y Blanco.
“La dictadura de Ortega se convirtió ya en un Estado policiaco en el que persiguen a los ciudadanos por ejercer su derecho legítimo a manifestarse que quiere convertir al país en una enorme cárcel”, aseguró Solís en entrevista en el programa Esta Semana.
Tras desplegar desde las seis de la mañana del domingo a más de 400 antimotines y oficiales de la Policía Nacional en toda la capital, con el fin de impedir la realización de la marcha “Unidos por la Libertad”, el régimen de Ortega mantiene retenidas a 30 personas.
“Aquí está en juego el futuro de Nicaragua y el presente. No es posible que vivamos como en una gran cárcel”, dice @AzahaleaSolis en #EstaSemana.
— Confidencial.com.ni (@confidencial_ni) 15 de octubre de 2018
Con esta nueva escalada represiva, Ortega impuso un “estado de excepción” en el país, al suspender por las vías de hecho los derechos fundamentales de la libertad de movilización y reunión pacífica, que están consignados en la Constitución de la República.
Orteguismo aumenta represión
La Policía Nacional informó que 38 personas fueron detenidas este domingo en el sector de Camino de Oriente, ocho de ellas han sido liberadas y los otros 30 permanecen en prisión mientras son investigadas, acusadas por estar “involucradas en actividades instigadoras y provocadoras” al convocar y participar en una manifestación pública “sin el debido permiso policial”.
Las autoridades policiales afirmaron que las detenciones de este domingo en Managua forman parte de las acciones contra “agrupaciones terroristas” que “violentan la paz y la tranquilidad” en Nicaragua.
Para Solís, la actuación del régimen orteguista “evidencia una gran debilidad” porque “le tiene miedo a la unidad del pueblo” y por otro lado “ha tenido que obligar a los trabajadores del Estado a salir a las calles a apoyarlo”.
“Ortega es como una fiera acorralada. Estamos en un momento decisivo en el que muchos de los aún simpatizantes del Gobierno deben protestar pues es la única forma de derrotar a la dictadura que tiene secuestrado a todo el país”, manifestó la también integrante de la Alianza Cívica.
Los presos y liberados
Tras las detenciones ilegales la Policía Nacional aseguró a través de un comunicado que así se “garantizó el orden y la seguridad en la capital ante los intentos de agrupaciones terroristas, golpistas y criminales que en los últimos meses han estado desarrollando acciones que violentan la paz y la tranquilidad”.
Los ochos liberados hasta el momento son: José Dolores Blandino, Marlen Chow, Alba Aragón Dávila, Ramiro Lacayo Deshon, Nena Gisela Morales, Arlin Martínez Luna, Elián Martínez González y Douglas Díaz Obando.
La PN secuestró a 38 personas hoy en Camino de Oriente. 8 han sido liberadas. Acá el comunicado. 30 permanecen detenidas y serán "investigadas" por participar en una manifestación pública que, según ellos, era "ilegal". pic.twitter.com/Ftko2UEPxM
— Franklin Villavicencio (@fvillabravo) 14 de octubre de 2018
Permanecen capturados: José Vega Potoy, Francisco Raúl Ortega, Marvin Reyes Rosales, Leo Manuel Navarrete, Freddy Ramírez Guido, Allan Cordero Ocón, Mauricio Ríos Mencías, Sandra Cuadra Murillo, Silvia Castillo Salaverry, María Alejandra Machado Blandón, Marcela Martínez Guzmán, Deysi Tamara Dávila Rivas, María Dolores Monge, María de los Ángeles Gutiérrez García y Suyen Barahona.
También siguen detenidos: Ana Lucía Álvarez Vijil, Sofía Gabriela Velázquez, Juan Omar Escorcia, Maynor Quintero Peña, Manuel Salvador Martínez, Rolando Tapia Orozco, Orlando Luna Guevara, Gustavo Adolfo Vargas Rojas, Ana Margarita Vijil, Kenneth Joel Saballos, Andrés Reyes Monge, José Antonio Peraza, Orlando Rafael Miranda, Roger Cano Lara y Gerson Delgadillo López.
La institución indicó que “realiza las investigaciones para determinar niveles de responsabilidad penal de los detenidos y los remitirá a las autoridades competentes para su enjuiciamiento”.
Además reiteró que “no se permitirán manifestaciones o movilizaciones en la vía pública que no cuenten con el debido permiso”, pese a que la Constitución de Nicaragua garantiza la libertad de movilización y de reunión sin necesidad de pedir permisos.
“Traspasa el límite de lo racional”, dice Báez
Monseñor Silvio Báez, obispo auxiliar de la Diócesis de Managua, lamentó en su homilía “la nueva represión brutal e irracional de la Policía Nacional”.
“Gente arrastrada por las calles, otros golpeados, sacados de sus carros; algo que traspasa el límite de lo racional y de lo humanamente aceptable”, manifestó el prelado.
Báez agregó que “esta práctica de la represión, de los encarcelamientos arbitrarios, de los juicios ilegales, no abona nada a la paz social del país, sino que más bien aumenta la espiral de insatisfacción y de peligro”.
“Detrás de esta crisis que vive el país no hay un golpe de Estado, aquí fue la violencia del Gobierno irracional lo que desató la insatisfacción (...) Ha sido la fuerza gubernamental la que produjo la crisis y la que la sigue agravando”, dijo el obispo a los medios de comunicación.
El cardenal Leopoldo Brenes, arzobispo de Managua instó a retomar el Diálogo Nacional para buscar una pronta salida a la crisis política que atraviesa el país desde abril.
«Y lo más diabólico, en Nicaragua se ha llegado incluso a pagar a algunos para que asesinen a otros seres humanos. Sí, muchos han asesinado por unos pocos billetes. Esto es diabólico. Aquí se ha pagado para matar» (De mi homilía dominical, 14/10/18).
— Silvio José Báez (@silviojbaez) 14 de octubre de 2018
“Tenemos que buscar otros métodos, el método esencial es el del diálogo, tenemos que agotar todas las medidas del diálogo”, manifestó este domingo el cardenal Brenes después de una misa en la Catedral Metropolitana de Managua.
Por su parte, monseñor Báez dijo que el diálogo "es el único camino pacífico" y que se deben agotar todos los medios para llegar a él.
“Creo que es momento de volver a la mesa del Diálogo. Es muy difícil pero no imposible. Es momento de sentarse a la mesa en donde esté representado el poder y los distintos sectores de la sociedad”, enfatizó el obispo.
Intimidación a periodistas
A pesar de los retenes policiales, unas 50 personas se reunieron el domingo en el sector de Camino de Oriente, pero a los pocos minutos centenares de antimotines cercaron el área. Los policías dispararon varias bombas de estruendo y sin aviso capturaron a la fuerza a los manifestantes, que fueron trasladados en varias camionetas con rumbo desconocido.
De igual manera, la Policía Nacional retuvo en el sector de Altamira por 20 minutos al equipo de La Prensa y 100% Noticias, entre ellos a los reporteros Roy Moncada, Engell Vega y el fotógrafo Jader Flores. El equipo periodístico de El Nuevo Diario también fue retenido por varios minutos.
#Ahora 🔴 | Ambiente tenso en el sector de Camino de Oriente. Fuerte despliegue policial secuestra a manifestantes que llegaron a manifestarse en contra del régimen de Daniel Ortega. Se confirma la detención de las activistas Suyen Barahona y Ana Margarita Vijil. pic.twitter.com/Gpuv9EJbE7
— Confidencial.com.ni (@confidencial_ni) 14 de octubre de 2018
Para Mariaelena, de la Articulación de Movimientos Sociales y Azahálea Solís, es imperativo recuperar el derecho a salir a las calles a protestar.
“Vivimos momentos difíciles, sabemos que muchos de los trabajadores del Estado están siendo vigilados, les controlan las llamadas y no pueden expresar una opinión contraria porque los corren, pero es momento de buscar nuevas formas de protestar y ellos deben sumarse”, insistió Mariaelena.
CIDH lidera condena internacional
La Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU (OACNUDH) mostró su preocupación luego de las violentas detenciones contra los manifestantes y reiteró su “llamado al Gobierno a que cese de inmediato el acoso, la intimidación y la penalización de las protestas”.
Mientras la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó a través de su cuenta de Twitter “profunda preocupación por las detenciones” y reiteró que “la protesta social es un derecho legítimo de los ciudadanos”.
El secretario ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrao, consideró “inaceptables” las “actitudes represivas y autoritarias” que se produjeron hoy en Nicaragua.
El titular de la CIDH ya había advertido anteriormente de la existencia de una “nueva etapa” de la represión con restricciones de derechos que apuntan a la implementación de un “estado de excepción” que sustituye al Estado de Derecho.
La @CIDH expresa profunda preocupación por detenciones de esta mañana en #Nicaragua y reitera que la protesta social es un derecho legítimo de los ciudadanos; llama al Estado a respetarlo y garantizar seguridad de las personas en contextos de manifestaciones públicas de protesta.
— CIDH (@CIDH) 14 de octubre de 2018
Por su parte el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, exigió a Ortega que libere a los manifestantes detenidos, respete su derecho a la protesta pacífica y cese la represión.
El Gobierno de Costa Rica hizo un llamado “al cese inmediato de la represión y las detenciones arbitrarias” en Nicaragua.
“Costa Rica respalda la preocupación manifestada por la comunidad internacional ante la erosión sistemática de los derechos humanos y las libertades fundamentales, que ocurre a diario en Nicaragua”, indicó en un comunicado el Ministerio de Relaciones Exteriores costarricense.
El presidente costarricense, Carlos Alvarado, llamó de forma “urgente al cese inmediato de la represión”.
El diálogo social es el camino correcto para fortalecer la democracia y los derechos humanos. Por ello, solicito a la comunidad internacional su mediación para que Nicaragua se restablezcan las condiciones necesarias que permitan retomar el diálogo, suspendido por mucho tiempo.
— Carlos Alvarado Q. (@CarlosAlvQ) 14 de octubre de 2018
“Las detenciones arbitrarias y la intimidación contra medios de comunicación, estudiantes, defensores de los derechos humanos y miembros de la Iglesia católica son inaceptables”, escribió el mandatario en su cuenta de Twitter.
El Relator Especial para la Libertad de Expresión de la CIDH, Edison Lanza, también condenó la actuación policial y el comunicado en el que criminaliza la protesta ciudadana.
“El derecho a manifestar no puede estar sujeto a autorización previa. La Policía nicaragüense quiere establecer una regulación previa para impedirlas o declararlas ilegales y reprimirlas. Esto contradice el derecho internacional”, expresó Lanza en Twitter.