15 de octubre 2018
La líder indígena Lottie Cunningham fue liberada hoy, horas después de haber sido detenida en el principal aeropuerto de Nicaragua junto a la activista de los derechos humanos y Haydée Castillo, quien fue encarcelada, informó el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
Cunningham y Castillo, quienes han participado en las protestas contra el presidente, Daniel Ortega, que tienen lugar desde abril pasado, fueron detenidas este domingo por agentes de la Dirección General de Migración y Extranjería, según sus familiares.
Cunningham --que también es defensora de los derechos humanos de grupos indígenas en la Costa Caribe de Nicaragua y presidenta del Centro por la Justicia y Derechos Humanos de la Costa Atlántica de Nicaragua (Cejudhcan)-- fue liberada, pero Castillo fue señalada del delito de "terrorismo" y enviada a la cárcel "El Chipote", según el Cenidh.
Haydee Castillo y Lottie Cunningham fueron obligadas por oficiales de migración a bajar de un vuelo en Managua. Lottie participó recientemente en la audiencia sobre la crisis de DDHH de los pueblos miskitos. Esta detención es una represalia a su labor: https://t.co/9bWPw321SJ pic.twitter.com/iIXBGAZ2an
— CEJIL (@cejil) 14 de octubre de 2018
"El Chipote" ha sido denunciada como un "centro de torturas" tanto por organismos defensores de los derechos humanos como por personas que han estado recluidas allí.
Cristiana Chamorro, directora de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, denunció que ambas activistas fueron detenidas antes de ingresar a un avión de la compañía American Airlines a eso de las once de la mañana. La detención se dio a conocer a través de las redes sociales del Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (Cejil).
Lottie Cunningham ha denunciado internacionalmente las violaciones de derechos humanos que el actual Gobierno ha ejercido hacia los pueblos misquitos del Caribe nicaragüense. Por su parte, Haydee Castillo es directora del Instituto de Liderazgo de Las Segovias.
Ambas activistas habían sufrido asedio de parte del Gobierno de Daniel Ortega, como campañas de difamación y amenazas de muerte. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) les había otorgado medidas cautelares.
Con información de EFE.