7 de octubre 2018
Tres partidos de izquierda, con representación en el Parlamento holandés, advirtieron a los diputados sandinistas de que están en “peligro de convertirse en una gran vergüenza” en el mundo, por su silencio y permisividad ante la represión del régimen orteguista contra el pueblo nicaragüense.
“Esperamos que ustedes (diputados sandinistas) sean conscientes del gran interés internacional de su actuación. Después de casi cuarenta años de su revolución, que era fuente de inspiración de millones de personas en el globo entero, conlleva el peligro de convertirse en una gran vergüenza”, indica una carta, firmada por los voceros del partido social-demócrata, el verde y el socialista.
Además los exhortan: “Representantes del pueblo, por favor actúa, toma en serio tu responsabilidad y defiende el derecho (inter-)nacional como lo hacían sus colegas en los años ochenta y noventa del siglo XX”.
La carta, dirigida a Gustavo Porras, presidente de la Asamblea y jefe de la banca sandinista, fue enviada el pasado 28 de septiembre, el mismo día en que el régimen declaró “ilegales” las manifestaciones cívicas y amenazó con encarcelar a las personas y organismos que las convoquen.
Acabar con represión
“Les pedimos a ustedes hacer todo lo posible para poner fin a la represión y la polarización que —conforme las noticias recibidas de parte de amigos y colegas—principalmente tienen su origen en la actuación del gobierno”, expresa la misiva.
“Los últimos meses a distancia fuimos testigos de las protestas y disturbios en su país. Cientos de personas han muerto, unos miles heridos, cientos de personas encarceladas, refugiadas, hasta hay casos de desapariciones”, describe la carta.
“Organizaciones de derechos humanos en Nicaragua e internacionales —la Organización de Estados Americanos y las Naciones Unidas— han demostrado en forma convincente que el Estado nicaragüense ha usado violencia excesiva y ha cometido violaciones sistemáticas de los derechos humanos. No solo nos lastima la decisión posterior de su presidente (Daniel Ortega) de terminar la misión de las Naciones Unidas sino también la consideramos como un error diplomático serio”, indican los voceros.
El partido social-demócrata, el verde y el socialista se describen como “tradicionalmente” solidarios con la lucha del “pueblo nicaragüense contra la dictadura de Somoza”. “Después de la caída de la dictadura de Somoza también hemos brindado apoyo político y material en función de la reconstrucción de Nicaragua”.
Afirman además que se han “opuesto —dentro y fuera del Parlamento— contra las políticas intervencionistas de los Estados Unidos en América Latina”.
El Partido Socialista y los Verdes tienen 14 representantes, cada uno, en el Parlamento de los Países Bajos, mientras el social-demócrata tiene nueve diputados. La Cámara de Representantes holandesa tiene 150 escaños.
Operación limpieza
“Mientras que oficialmente expresa al exterior de que está haciendo serios esfuerzos por la paz y la tranquilidad, su Gobierno está llevando a cabo la ‘Operaciôn Limpieza’. También en este marco se cometen sistemáticas violaciones de los derechos humanos. Secuestros y detenciones arbitrarios de opositores, torturas, y acusaciones falsas por terrorismo”, manifiestan en el escrito.
“Aparte de eso, cientos de maestros y trabajadores de salud han sido despedidos por considerarles como adversarios del gobierno y —aún más serio— por haber brindado asistencia médica a heridos considerados como opositores anti gubernamentales. Ellos han sido despedidos por el ‘delito’ de tomar en serio las normas de la ética de la medicina, como formuladas en el Juramento de Hipócrates”, según la correspondencia.
Los voceros señalan que unos “veinte especialistas holandeses, médicos y otros trabajadores de salud con muchos años de experiencia de trabajo en Nicaragua, han protestado contra este exceso por medio de una carta abierta al Ministro de Salud”.
Podés descargar la carta aquí.