16 de julio 2018
Masaya fue atacada sin piedad por paramilitares y oficiales de la Policía Nacional este domingo por la mañana. Los armados atacaron los barrios de la ciudad y también dispararon contra los pobladores de los municipios de Niquinohomo, Diriomo, Diriá y Catarina.
Preliminarmente se informó de cinco muertos en todo el departamento, sin embargo, CONFIDENCIAL confirmó dos: José Esteban Sevilla, quien vivía cerca del museo Camilo Ortega, y Dorian Orlando Montoya, habitante del barrio Silvio Renazco, ambos de la ciudad de Masaya, quienes estaban cerca de las barricadas de sus respectivos barrios.
La información de dos de los muertos en Diriá, Allan Morales y su hermano Almer Morales, excandidato a alcalde por el PLC, es falsa. Si bien existe una cacería en el pueblo y circulaban decenas de armados, los pobladores de ese municipio descartan su muerte. Lo que sí es oficial, son las decenas de heridos y capturados de parte de los paramilitares en estos poblados.
Un grupo del Mecanismo de Seguimiento para Nicaragua (Meseni) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que tenía previsto viajar Masaya, canceló su viaje por razones de seguridad, según sus portavoces.
Tanto en los “Pueblos Blancos”, como en Masaya, el ataque empezó a eso de las seis de la mañana. El objetivo de los paramilitares era desmontar los tranques y barricadas que los ciudadanos habían instalado como autodefensa contra los propio armados.
Los paramilitares llegaron a Diriomo, Diriá y demás municipios, armados con fusiles de guerras, a bordo de camionetas Hilux y con el respaldo de la Policía Nacional y retroexcavadoras.
@CIDH toma conocimiento de represión violenta a las poblaciones de Masaya, Niquinohomo, Catarina, Diriomo y Diria, con heridos y detenidos. El Estado parece ignorar el diálogo. #Nicaragua debe garantizar la vida de las personas y respetar el debido proceso legal. https://t.co/1D4DF1NV0X
— Paulo Abrāo (@PauloAbrao) July 15, 2018
A pesar de que a esa hora cayó una fuerte lluvia, los paramilitares dispararon a mansalva contra los tranques. Lo morteros con los que se defendían los ciudadanos, detonaban esporádicamente, mientras que las ráfagas de balas eran a cada momento.
Los jóvenes y adultos que resguardaban los tranque tuvieron que salir huyendo, pues no pudieron hacer frente a un armamento integrado por AK, M 16 y PKM, informaron los ciudadanos.
Tras el ataque a Diriá, los paramilitares avanzaron a Catarina, pero dos camionetas que se quedaron, reunieron a armados en Diriomo y se trasladaron al primer municipio, donde hasta el cierre de esta nota, existía una cacería casa a casa a los señalados de dirigir los dos tranques y las protestas.
Los paramilitares enfilaron la cacería en Diriá contra los excandidatos a alcaldes Rogelio Ortega (del ALN a quien lograron apresar) y Almer Morales (PLC), destruyendo sus casas. También persiguen a Oswaldo Morales, del Movimiento 19 de Abril, en esa ciudad.
https://twitter.com/CSMaldonado/status/1018653162759249920
En Niquinohomo también realizan persecución. Uno de las primeras acciones que hizo el grupo de paramilitares que entraron a esa ciudad, fue quitar la bandera de Nicaragua, que tenía la estatua de Sandino, y reemplazarla por una del Frente Sandinista.
Masaya resistió
En la ciudad de Masaya los paramilitares que atacaban desde la mañana, lograron apropiarse del tranque ubicado en Mebasa, una empresa propiedad de Cargill, una multinacional con más de 150 años de ser fundada en Estados Unidos.
Los ciudadanos de los barrios Las Malvinas y cercanos al sector del museo Camilo Ortega, solicitaron el apoyo de los habitantes de Monimbó, quiénes desde las 6:00 hasta las 11:00 de la mañana lograron resistir, y contrarrestar la fuerza del ataque paramilitar.
Me informan que han llegado antimotines y paramilitares a Diriá, Niquinohomo, Catarina, y probablemente después a Monimbó en Masaya. ¡A todas las personas de estas ciudades, les ruego escapen, protéjanse y salven sus vidas! ¡Evitemos más muertes! Les acompaño con mi oración.
— Silvio José Báez (@silviojbaez) July 15, 2018
La unión que realizaron entre todos los ciudadanos, permitió que los paramilitares abandonaran el tranque de Mebasa, y que este fuera recuperado por los propios ciudadanos. Los armados tuvieron que replegarse hasta la rotonda Las Flores, donde habían permanecido durante los últimos días.
“Solo el pueblo salva al pueblo. Si nosotros no nos mantenemos unidos, Daniel nos va a matar”, dijo uno de los ciudadanos que estuvo resistiendo en el enfrentamiento.
Extraoficialmente se conoce que los masayas lograron capturar al menos a cinco paramilitares. Por la tarde, circularon algunas imágenes de un “paramilitar” abatido en el tranque de Mebasa. Se desconoce su nombre y de dónde era originario.
Paulo Abrao, secretario general de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), escribió en su cuenta de Twitter que ese organismo “toma conocimiento de represión violenta a las poblaciones de Masaya, Niquinohomo, Catarina, Diriomo y Diriá, con heridos y detenidos. El Estado parece ignorar el diálogo. Nicaragua debe garantizar la vida de las personas y respetar el debido proceso legal”.
La comisionada de la CIDH, Antonia Urrejola, expresó que el Estado deberá investigar con la debida diligencia toda la violencia que ocurre en Nicaragua, para asegurar el derecho a la verdad y la justicia.
“Es imperativo que el Estado remita el listado de todas las personas fallecidas y heridas… y que investigue estos hechos de forma inmediata y expedita”, insistió Urrejola.
Por su parte Carlos Trujillo, embajador de Estados Unidos ante la OEA, recalcó que ese organismo seguirá cumpliendo esta semana y abordará el deterioro de la situación en Nicaragua.
“La represión violenta del Gobierno mediante el uso de maras sandinistas es inaceptable. Estados Unidos responsabilizará a los infractores de los derechos humanos”, refirió Trujillo.
Caravana en solidaridad
Cientos de personas a bordo de motocicletas, vehículos y camionetas salieron de Managua rumbo a Masaya, la tarde de este domingo, en solidaridad con los ciudadanos de Masaya, quiénes recibieron un fuerte ataque de paramilitares y oficiales de la Policía Nacional.
Antes de partir desde la Rotonda de Metrocentro, los ciudadanos se arrodillaron sobre el pavimento, elevaron una oración por sus vidas, pidieron protección a Dios y luego entonaron las notas del Himno Nacional.
La caravana fue liderada por los estudiantes que integran la Alianza por la Justicia y la Democracia. Los universitarios expresaron en primera instancia, que llegarían hasta donde pudieran. Su intención era llegar hasta Masaya como forma de solidaridad.
"¡Ni un paso atrás!", "!Que se rinda tu madre!", "¡Viva Nicaragua libre", gritaron, entre otras consignas, los manifestantes, que en su mayoría iban ataviados con la bandera de Nicaragua atada al cuello y tocando las bocinas de sus vehículos.
Algunos de los participantes cubrían sus rostros con pañoletas de color azul y blanco, los motorizados con el casco de protección y otros alzan sus banderas. A su paso por la carretera hacia Masaya numerosos peatones y pobladores de todas las edades, salieron de sus casas lanzando proclamas en favor de los estudiantes y manifestantes antigubernamentales, y contra el Gobierno y levantaron los puños en señal de victoria.
"Mi mensaje (al presidente Daniel Ortega) es que se convenza, que no tiene nada qué hacer en este país, que se convenza que ha perdido, que se convenza que no puede seguir ultrajando al pueblo. Es demasiado", comentó un hombre con el rostro cubierto que se identificó como excombatiente del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
La caravana avanzó hasta la rotonda de Ticuantepe. En ese sitio se reunieron para platicar si era prudente avanzar hasta Nindirí o Masaya. Primero dijeron que iban a retornar, porque no era necesario exponer la vida de los ciudadanos, sin embargo, minutos después un grupo de motorizados aseguraron que hasta el kilómetro 21, podrían realizar su recorrido.
En efecto, la caravana avanzó hasta el kilómetro 21. No llegaron a Nindirí, pues los paramilitares y policías tenían bloqueada la pasada y se temía un ataque contra los pobladores.
A su regreso los manifestantes decidieron realizar una parada cerca de la rotonda Centroamérica, en la casa donde vivía Gerald Vázquez, estudiante universitario que fue asesinado la madrugada del sábado en un ataque de armados contra los estudiantes que se refugiaban en la parroquia La Divina Misericordia.
La caravana hizo un último recorrido por algunos barrios orientales de Managua. Afortunadamente no hubo incidentes que lamentar. Lo que si se vio, fue el apoyo de los ciudadanos, quienes se unieron a la caravana y salieron de sus casas a ondear sus banderas en señal de respaldo.
(Con información de EFE y Arlen Cerda).