13 de julio 2018
Cuatro policías y un civil murieron tras un confuso tiroteo, la tarde de este jueves, en la comunidad Morrito, del departamento de Río San Juan. La Policía Nacional y los pobladores ofrecen versiones diferentes sobre los hechos.
En las redes sociales circulan fotos sobre los policías asesinados. En estas se observa a al menos uno de los oficiales con un disparo entre el ojo y la ceja izquierda. Otro de ellos, boca abajo, aparentemente con un disparo también en la cabeza, y los otros dos agentes con disparos en el pecho y la parte baja del tórax.
La Policía Nacional confirmó que los policías fallecidos son el comisionado Luis Emilio Bustos López, el suboficial mayor Marlon José Requene López, el suboficial Lenin Ernesto Olivas Alaniz y el policía Faustino Téllez Vargas.
La versión policial responsabiliza del ataque a "grupos de terroristas" que ubica en el tranque del empalme de Morrito y el empalme de Lóvago (Chontales), "simulando --dice la Policía-- realizar una denominada marcha pacífica", pero que de "manera vil y cobarde atacaron con armas de fuego la delegación policial".
Además, la Policía afirma que secuestraron a nueve policías, que fueron trasladados al tranque del empalme de Lóvago, y también atacaron la Alcaldía Municipal de Morrito, hiriendo con armas de fuego a trabajadores de la municipalidad, entre quienes falleció Marvin Francisco Ugarte Campos, de 49 años de edad, profesor de primaria en la escuela Ángel Salazar.
Aunque la Policía no identificó a los supuestos policías secuestrados, un video divulgado por miembros del movimiento campesino revela que al menos tres oficiales y otros tres ciudadanos fueron atendidos por médicos voluntarios, y que el ataque vino desde la misma Alcaldía de Morrito.
El campesino que filmó el video pregunta a un joven quiénes los atacaron. El joven, a quien atienden por una herida en el hombro izquierdo, responde que fueron "los mismos compañeros de la Alcaldía, desgraciadamente compañeros si se les puede decir".
Esposo de alcaldesa insultó a manifestantes
Pobladores de la zona aseguran que el enfrentamiento ocurrió cuando decenas de habitantes de la comunidad participaron en una réplica de la marcha nacional "Juntos somos un volcán", que este jueves reunió a una multitud en Managua.
"Cuando la marcha pasaba por una de las calles aledañas a la Alcaldía de Morrito, el esposo de la alcaldesa comenzó a insultar y gritar a los manifestantes, que también respondieron los insultos, los ánimos se caldearon, hubo disparos al aire, se armó confusión y comenzó un tiroteo", relató una fuente del lugar, que solicitó no ser identificado.
El poblador confirmó a Confidencial que los campesinos llevaban algunas armas de portación legal, y que estos habrían respondido los disparos. Hasta ahora se desconoce si hay heridos entre los campesinos. Algunos comunitarios aseguran que unas 17 personas resultaron heridas.
El secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Pablo Abrao, y la comisionada y relatora para Nicaragua, Antonia Urrejola, condenaron los hechos, en sus cuentas de Twitter, reiterando el llamado al cese de la violencia.
La @CIDH condena los actos de violencia en #Morrito, que provocaron el asesinato de 4 policías y 1 profesor, rechaza enérgicamente estos hechos inaceptables, y espera investigaciones efectivas que aclaren las muertes. Reiteramos nuestro llamado al cese de la violencia. https://t.co/T6YozAqBRq
— Paulo Abrāo (@PauloAbrao) 13 de julio de 2018
El periodista Pedro Olivas, corresponsal de Canal 10 en ese departamento, confirmó en un reporte de última hora, la noche de este jueves, que el agente de tránsito Lenin Olivas es su hermano, con solo un mes de servicio en el lugar. En la transmisión de Olivas, con baja calidad debido a la poca penetración de la telefonía en Morrito, fue evidente su estado de shock.
Horas antes del tiroteo en Morrito, desde el municipio de San Carlos, cabecera departamental de Río San Juan, varios pobladores observaron la partida de dos lanchas con oficiales de refuerzo.
Se eleva número de oficiales asesinados
Una tercera versión indica que los oficiales asesinados supuestamente se negaron a reprimir a la población y habrían intentado desertar y abordar una camioneta de los campesinos, cuando fueron atacados por paramilitares y otros policías. Razón por la que los campesinos también habrían atacado la delegación y la Alcaldía. Sin embargo, esta versión no ha sido confirmada o descartada por la Policía ni los pobladores.
Hasta el miércoles reciente, al menos doce policías se registraban en la lista de asesinados desde el pasado 19 de abril, en el contexto de la represión a las protestas contra el Gobierno de Daniel Ortega y su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo.
Un mes atrás, en Mulukukú, dos policías y un civil también fueron asesinados en un ataque a la delegación policial de ese municipio del Caribe Norte. Otros familiares también han denunciado que algunos policías que se negaban a reprimir han sido ejecutados por grupos paramilitares.