La “operación limpieza” fue aplicada en la ciudad de La Trinidad, Estelí, por decenas de oficiales de la Policía Nacional y grupos paramilitares, que desmantelaron los tranques del pueblo (el principal bloqueaba la ruta panamericana) y atacaron a los manifestantes que intentaron hacer resistencia.
Producto de la brutal represión al menos nueve personas resultaron heridas. Luego de desmantelar los tranques, los oficiales y paramilitares iniciaron una “cacería” para capturar a los ciudadanos que participaron de las protestas. Al menos cinco fueron retenidos de forma ilegal por estos grupos. Algunos, que se refugiaron en la Iglesia La Candelaria, fueron rodeados por los armados y atacados. “Están por todo el pueblo, no podemos salir”, aseguró una pobladora.
Los medios oficiales reportaron la muerte de Miguel Ramos, militante sandinista. La información publicada refiere que Ramos, mejor conocido como "Franklin" fue "asesinado por delincuentes" en La Trinidad.
#Urgente 🔴 | Fuerzas armadas que salieron de Esteli se dirigen a La Trinidad a atacar el tranque sobre la panamericana. Las campanas del pueblo suenan en alerta #SOSNicaragua. pic.twitter.com/mnPkR3Pcs0
— Wilfredo Miranda (@PiruloAr) 3 de julio de 2018
El cardenal Leopoldo Brenes confirmó el asedio que los armados mantenían hasta altas horas de la noche. “El templo parroquial está rodeado por miembros de la Policía Nacional y paramilitares causando temor a sacerdotes y fieles que están en su interior. Pido a la dirección nacional de la Policía suspender dicha acción de acoso, para que dichos fieles puedan retornar a sus hogares”, expresó el líder religioso en la página de Facebook de la Arquidiócesis de Managua.
Sacerdotes de la ciudad de Estelí intentaron llegar hasta La Trinidad para realizar una labor de mediación y evitar más derramamiento de sangre, sin embargo, fueron retenidos por grupos paramilitares, que evitaron que los líderes religiosos avanzaran para cumplir con su misión.
“Me uno al dolor de mi Hermano Monseñor Juan Abelardo Mata, elevo mis oraciones y súplicas al Dios de la vida y a la Santísima Virgen para que protejan a estos sus hijos que están en peligro. De igual manera condeno la agresión al equipo periodístico de TV Merced de la Diócesis de Matagalpa, quienes se disponían a dar cobertura de la labor profética de los sacerdotes de la diócesis de Estelí en el sector de la Trinidad”, reafirmó el Cardenal Brenes.
La hora cero, tras cuarenta días de resistencia
El ataque empezó a eso de las 12:00 del mediodía tras el anuncio de las campanas de la iglesia La Candelaria. Según denunciaron los ciudadanos de La Trinidad, eran alrededor de “doscientos policías” y como “cien paramilitares” que irrumpieron por el lado norte de la ciudad. Llegaron armados con rifles de guerra, AK, escopetas, además de camiones y retroexcavadoras.
Los ciudadanos intentaron frenar el avance de los armados, sin embargo, fue imposible pues contra las armas de alto calibre y francotiradores, no podían poner mucha resistencia. Finalmente decidieron huir de los tranques y resguardar sus vidas.
El tranque de La Trinidad había resistido cuarenta días. El alcalde Bismark Rayo declaró que existía un acuerdo entre el jefe de la Policía de Estelí, Comisionado Alejandro Ruiz, de que no iban ni asediar ni atacar el pueblo.
Sin embargo, Rayo recibió una llamada el lunes de parte del Comisionado Ruiz, quien dio un ultimátum al tranque de La Trinidad. Si no lo levantaban a la mayor brevedad, "lo iban a limpiar". "Tienen órdenes de limpiar la Panamericana", dijo el alcalde.
Me informa Mons. Mata, Obispo de Estelí, que había un acuerdo entre el Comisionado y los del tranque de La Trinidad, de que la Policía no atacaría y los del tranque flexibilizarían. Hoy atacaron por órdenes de “arriba”. No han dejado entrar a sacerdotes para mediar. Hay heridos.
— Silvio José Báez (@silviojbaez) 3 de julio de 2018
Monseñor Silvio Báez confirmó la versión de Rayo. A través de un tuit declaró que “que había un acuerdo entre el Comisionado y los del tranque de La Trinidad, de que la Policía no atacaría y los del tranque flexibilizarían. Hoy atacaron por órdenes de “arriba”. No han dejado entrar a sacerdotes para mediar. Hay heridos”, escribió.
CONFIDENCIAL llamó al comisionado Ruiz para conocer cuál había sido la razón por la que el “acuerdo” de no atacar se había violado. El jefe policial aseguró desconocer sobre el tema que le planteamos. “No sé nada de eso”, respondió, y luego cortó de forma abrupta la comunicación.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se pronunció sobre la situación en La Trinidad. A través de su cuenta de twitter manifestó que había recibido información de que un “un grupo de personas se encuentra sitiada y en grave riesgo, por un grupo de personas armadas. CIDH insta a autoridades de Nicaragua a adoptar medidas para respetar y garantizar la vida de personas en Trinidad”.
Recibimos información que en estos momentos un grupo de personas se encuentra sitiada y en grave riesgo en La Trinidad, Estelí, por un grupo de personas armadas. @CIDH insta a autoridades de #Nicaragua a adoptar medidas para respetar y garantizar la vida de personas en Trinidad
— CIDH (@CIDH) 3 de julio de 2018
Hasta las 12:00 de la noche de este martes, La Trinidad permanecía sitiada por los policías y paramilitares. Los armados ordenaron cerrar el hospital público para no atender a los heridos. También irrumpieron en las casas de algunos ciudadanos y quebraron los vidrios de la iglesia La Candelaria.
“Estamos atrapados, esto es horrible, estamos en riesgo”, mencionó otro ciudadano.
También atacan Jinotepe
Las campanas de la parroquia Santiago de Jinotepe empezaron a sonar casi al mismo tiempo que la sirena de la Estación de Bomberos poco antes de mediodía, cuando paramilitares encapuchados llegaron a disparar a diferentes barricadas de la ciudad.
Los paramilitares ingresaron a la ciudad por el camino del Dulce Nombre, donde pobladores reportaron ver pasar una caravana de camionetas con decenas de armados. También atacaron por el sector de Hertylandia, donde jóvenes reforzaban los tranques la mañana de este martes.
Suenan las campanas de la parroquia de Jinotepe en alerta por ataque. #SOSNicaragua @confidencial_ni pic.twitter.com/6Z9qXOZXX8
— Yader Luna (@Lunacero) 3 de julio de 2018
El Movimiento 19 de abril en Jinotepe reportó tres personas capturadas por los paramilitares. Las personas son José Dolores Borge, Manuel Hernández Vega y Edwin Acevedo Hernández.
Familiares de Borge denunciaron, por redes sociales, que el hombre fue secuestrado al momento del ataque y que se encuentra detenido en El Chipote.
“Él ha apoyado como todos los ciudadanos de Jinotepe y se lo llevaron sin ninguna razón. No es ningún delincuente”, explicó uno de sus familiares.
Miembros del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), quienes recogían denuncias en Jinotepe se movilizaron a las barricadas para tratar de mediar y evitar nuevos ataques.
“Es un ataque que ya lo veníamos esperando porque desde temprano se nos había alertado de movimiento de camionetas con paramilitares”, aseguró uno de los representantes del Movimiento 19 de abril.
Pobladores denuncian que la intención es quitar los tranques antes del 5 de julio, fecha en que se celebra la liberación de Jinotepe de la dictadura somocista.
“No hay nada que celebrar, porque vivimos bajo una nueva dictadura”, expresó el vocero de los manifestantes que exigen la salida del poder de Daniel Ortega.
De inmediato todos los restaurantes, tiendas y el mismo mercado cerraron tras el ataque. Poco antes de las dos de la tarde, ciudadanos denunciaron que siete encapuchados con arma de fuego saquearon el Centro Técnico de Jinotepe.
Secuestran a dos en Las Esquinas
En el sector de Las Esquinas el dueño de un microbús interlocal denunció que secuestraron su unidad cuando se dirigía a Managua con pasajeros. Aunque la unidad fue entregada a sus dueños, pero quedaron retenidos el conductor y el ayudante.
Los detenidos son Jefferson Largaespada Espinoza y José Luis Zambrana, a quienes se les acusa de tomar fotografías en el sector de Las Esquinas, donde permanecen paramilitares.
También en Masaya
En la ciudad de Masaya, específicamente en el barrio San Carlos, la Policía Nacional y grupos paramilitares, detuvieron ilegalmente al propietario del bar Lesbistro, Gustavo Ríos, y al diseñador Josué Pascua. Los vecinos denunciaron que también se llevaron detenido a tres jóvenes más.
Los testigos manifestaron que el ingreso de las fuerzas armadas fue por la mañana. Además de capturar a los ciudadanos antes mencionados, retiraron algunas barricadas que estaban en el sector. Intimidaron a la población y amenazaron con sus armas de fuego de alto calibre.
Producto de este nuevo ataque, los ciudadanos de Masaya y de Monimbó aseguraron, luego de sostener una reunión, que reforzarán los tranques. Esto por la amenaza de que el Gobierno, supuestamente, quiere realizar el repliegue el próximo sábado.