4 de abril 2018
Un grupo de organizaciones nacionales que defienden los derechos de las trabajadoras nicaragüenses en Costa Rica, se pronunciaron la mañana de este martes en torno a las dificultades que enfrentan las mujeres en el vecino país del sur, especialmente quienes no cuentan con un permiso de trabajo vigente.
La preocupación de estas organizaciones es la próxima entrada en vigencia del artículo 33 de la Ley 8764, Ley General de Migración y Extranjería de Costa Rica, que establece que las personas extranjeras a las que “se les ha vencido el plazo de estadía en el país, tendrán que pagar una multa de 100 dólares por cada mes de permanencia” en ese país.
“En caso de no cancelar, se les denegará el permiso de trabajo para ingresar nuevamente al país. La medida toma mayor rigor ya que es retroactiva e imposible de pagar, si se toma en cuenta que es una disposición que data desde 2010, año en que entró en vigor la reforma a la ley”, explicó Esthela González, representante del Comité Nacional de Mujeres Sindicalistas de Nicaragua.
González afirmó que existen miles de mujeres que trabajan en la agricultura y en la recolección de flores, el cuido de ancianos y niños, en tiendas, restaurantes. En la medida que no se tenga el documento que ampare al trabajador o trabajadora, existirá una situación de “explotación y de temor constante” frente a operativos migratorios.
Para tramitar un permiso laboral los trabajadores tiene que presentarse a la oficina de Migración en Costa Rica y presentar, además del pasaporte con la visa vigente, el certificado de nacimiento, el récord de policía, entre otros documentos, que solo se pueden obtener en Nicaragua, y no en el consulado nacional en Costa Rica.
“Es muy complicado para una trabajadora migrante pedir permiso para hacer un viaje para la gestión de los documentos a Nicaragua. Esto implica tiempo y dinero. En muchos casos cuando la trabajadora regresa a casa de su empleadora, le dicen que se le reemplazó y pierde el trabajo”, manifestó González.
El subsidio y el apoyo a las trabajadoras
La Federación de Trabajadoras Domésticas Julia Herrera, el Comité Nacional de Mujeres Sindicalistas, la Asociación de Trabajadoras Domésticas Nicaragua, la Red de Trabajadoras Sexuales RedSaTrex Girasoles y el Comité Intersindical de Apoyo a las y los Trabajadores Migrantes en Nicaragua en coordinación con la Asociación de Trabajadoras Domésticas en Costa Rica, son parte de las organizaciones que suscribieron el pronunciamiento que busca proteger y apoyar a las mujeres en ese país.
Durante la presentación del pronunciamiento se explicó la “urgente necesidad” de contar con los documentos legales para las trabajadoras domésticas, principalmente para aprovechar el subsidio a los empleadores que el Estado de Costa Rica mantiene desde agosto de 2017 con el fin de que puedan asegurar a las trabajadoras domésticas.
“Por eso las organizaciones que trabajamos con las trabajadoras y trabajadores migrantes en Costa Rica, estamos abiertas a un espacio de diálogo con el Gobierno nicaragüense. Respecto al inminente multa de cien dólares a partir de finales de abril, las organizaciones de migrantes en Costa Rica estamos haciendo diversas gestiones para que se establezca una moratoria de al menos un año, o bien que se avance en la reforma a la Ley de Migración en Costa Rica”, aseguró González.
Yolanda Arauz, coordinadora del Comité Nacional de Mujeres sindicalistas en Nicaragua, agregó que espera que las reuniones que sostendrán con autoridades del Gobierno de Nicaragua, facilite la situación legal de muchas mujeres que no tienen el tiempo para tramitar todos los documentos.
“El efecto que podría tener en la economía familiar, que se cobre esta multa y que más mujeres regresen al país sin trabajo, sería de suma importancia. Esto implicaría que dejarían de entrar remesas al país”, alegó Arauz.
Francisco Martínez, coordinador nacional del Comité de Apoyo de Migrantes de Nicaragua, expresó que este esfuerzo articulado para apoyar a las trabajadoras, debe ser apoyado por el Gobierno y debe brindársele una pronta solución.
Por su parte González, manifestó que tienen nuevas y buenas expectativas con el nuevo gobierno, para que este abra un canal del diálogo y que las voluntades de ambos Gobiernos resuelvan la situación de las mujeres trabajadoras.
“Con estas acciones iniciadas en esta campaña, tenemos muchas expectativas de que las puertas que toquemos se abran e incidamos en nuestro país para que se pueda lograr un acuerdo binacional. Vamos a tener muchas reuniones con autoridades del Gobierno, tenemos muchos espacios como el Parlamento Centroamericano, el Ministerio del Trabajo, la misma Asamblea Nacional. Se trata de apoyar a las trabajadoras”, finalizó González.