8 de noviembre 2016
El lunes siete de noviembre el partido indígena YATAMA convocó a una marcha pacífica en la ciudad de Puerto Cabezas para celebrar lo que, según ellos, era la elección de Brooklyn Rivera como diputado regional. Sin embargo, el partido Frente Sandinista convocó a una contramarcha, lo que desembocó en disturbios y enfrentamientos entre ambos bandos y antimotines de la Policía Nacional.
Rivera, además de celebrar su elección, cuestionaba en la manifestación los comicios. Según este ex aliado del Frente Sandinista, el Consejo Supremo Electoral no “respeta la voluntad popular” al denunciar varias anomalías en Juntas Receptoras de Votos (JRV), entre ellas 18 circunscritas en el territorio Wangki Twi Tasba Raya.
El exdiputado de Yatama, destituido por una decisión del gobierno de Daniel Ortega en septiembre de 2015, cuando lo señalaron de estar involucrado en el tráfico de tierras indígenas, dijo que el Poder Electoral pretende anular las JRV. La razón es que los votantes de la zona dejaron en blanco la casilla presidencial, y solo marcaron la de diputados.
“El Consejo Supremo Electoral quiere anular, reducir a YATAMA… los indígenas pueden depositar su voto donde quieran, no es obligatorio marcar la casilla de presidente”, aseguró Rivera.
Durante la campaña electoral en las regiones autónomas, YATAMA pidió a sus seguidores a dejar en blanco la casilla presidencial. Rivera dijo que el control del Frente Sandinista en los Centros de Votación este seis de noviembre fue desproporcional. En la misma línea apuntó Elízabeth Henríquez, presidenta del partido indígena, quien aseguró que todos los fiscales de los partidos comparsas eran en realidad militantes sandinistas.
YATAMA no solo reclama la elección de Rivera como un hecho, sino que la de un segundo parlamentario regional. Este lunes el presidente del Poder Electoral, el magistrado Roberto Rivas, no presentó los resultados regionales de estas elecciones distinguidas por la alta abstención.
Por esa razón YATAMA convocó a la marcha en Puerto Cabezas, para celebrar la “elección” de Rivera y demostrar su descontento con “la manipulación del CSE”.
La marcha de YATAMA, dijo Henríquez, recorrió las principales calles de Puerto Cabezas, pasó por el centro de cómputo electoral ubicado en el Instituto Nacional Tecnológico (Inatec) y se deshizo frente a la sede del gobierno regional, donde estaban partidarios sandinistas. Allí estalló la violencia
Ambos bandos se acusan de iniciar el enfrentamiento, pero lo cierto es que simpatizantes de YATAMA y sandinistas resultaron heridos. Hubo pedradas, morteros, dos motos quemadas y una casa dañada.
Además, la sede del gobierno regional resultó dañada. Ventanas quebradas, computadoras quebradas, escritorios destrozados pueden verse en las fotografías y videos que documentaron la trifulca.
Había muchos jóvenes encapuchados, pero Henríquez negó que YATAMA haya cometido vandalismo. Waldo Müller, presidente del gobierno regional e involucrado en el tráfico de tierra, según una investigación de Confidencial, no respondió nuestras llamadas.
Los antimotines se sumaron al disturbio, pero a juicio de Rivera, en vez de tener un papel neutro, se pudieron del lado de la Juventud Sandinista. “La marcha de YATAMA era grande, la gente se sumaba y los jóvenes sandinistas nos atacaron y se replegaron en el gobierno regional”, describió Rivera.
El exdiputado denunció que varios jóvenes de YATAMA fueron apresados. Relaciones Públicas de la Policía Nacional dijo a Confidencial que no tenían explicación oficial sobre estos disturbios. El comisionado y vocero de la institución, Cesar Cuadra, como es usual, no contestó nuestras llamadas.
El mediodía de este martes, más tropas especiales de la Policía aumentaron en Puerto Cabeza y efectivos militares rodearon el aeropuerto, reportó Henríquez. “La Policía no es imparcial”, reclamó la presidenta de YATAMA.