Los papeles de Panamá han dejado en evidencia como operan algunas corporaciones y grandes fortunas para legitimar capitales y evitar el pago de impuestos. Billones de dólares se mueven en los paraísos fiscales. Ahora algunos de los mecanismos opacos utilizados para esos movimientos han salido a la luz, con enormes repercusión internacional y efectos inmediatos sobre algunos líderes políticos.
Una filtración tan gigantesca y detallada de información financiera no podía dejar de provocar polémica, como no lo ha dejado en este caso. Trataremos aquí de destacar algunas.
¿EEUU, Rusia, China?
Los comentarios han llamado la atención sobre la ausencia de empresas, empresarios o políticos norteamericanos en las listas. Y si bien no aparecen directamente vinculados con cuentas offshores los presidentes ruso, Vladimir Putin, ni chino, Xi Jinping, sí aparecen mencionados colaboradores cercanos o parientes.
El gobierno chino no se ha referido a las acusaciones, pero el Global Times, diario en inglés que pertenece al Partido Comunista chino, denunció las revelaciones como “nuevos instrumentos de los aliados ideológicos de las naciones occidentales para golpear las élites políticas no occidentales”.
La prensa rusa, por su parte, ha tratado de explicar las filtraciones atribuyéndolas a un intento de redirigir los capitales depositados en las offshores europeas a los Estados Unidos, donde algunos estados –Nevada, Dakota del Sur, Wyoming y Delaware– son identificados como “paraísos fiscales absolutos”.
La agencia rusa RT titula: “Papeles de Panamá': El escándalo de las offshores redirigirá billones de dólares a EEUU”. "Lo que está sucediendo ahora es que EEUU está tratando de 'secar' ciertos paraísos fiscales para presentarse a sí mismo como el nuevo y mayor paraíso fiscal del mundo", afirma.
Pero realizar una operación de esta magnitud, que afecta el sistema como un todo e involucra a aliados cercanos de Washington, parece un intento de matar moscas a cañonazos.
El presidente ruso reaccionó a las revelaciones recordando, primero, que no aparece involucrado personalmente con ninguna inversión en paraísos fiscales. Pese a eso el diario británico The Guardian afirma que el rastreo de cuentas por dos mil millones de dólares ”conducen a Vladimir Putin”.
El diario menciona el envolvimiento de Bank Rossiya, dirigido por Yuri Kovalchuk, y a Sergei Roldugin, un viejo amigo de Putin, que aparecen involucrados en cuentas de paraísos fiscales.
En declaraciones a RT Putin afirmó, luego de su difusión, que los Papeles de Panamá son, en realidad, un intento de desestabilizar la situación de su país “desde dentro”.
El 5 de abril, Wikileaks, la organización que dirige Julian Assange desde su encarcelamiento en la embajada de Ecuador en Inglaterra, se sumó a la polémica. Wikileaks publicó, en su cuenta de Twitter, que "el ataque de los 'papeles de Panamá' contra Putin fue organizado por el Organized Crime and Corruption Reporting Project (OCCRP), la organización que hackeó los documentos, a la que acusa de estar financiada por la agencia norteamericana USAID y por el millonario húngaro George Soros.
Aunque en otro mensaje, Wikileaks especificó que las "afirmaciones de que los Papeles de Panamá son una trama contra Rusia no tienen sentido", insistió en que las fuentes de financiamiento de la OCCRP terminaron por “inclinar la cobertura".
OCDE
La OCDE, organización dirigida por el mexicano Ángel Gurría, figura clave en la negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA) entre su país, Estados Unidos y Canadá hace ya más de 15 años, desde hace meses viene exigiendo a Panamá mayores controles sobre sus servicios financieros.
Esto ha generado tensiones con las autoridades panameñas, que no ocultaron su desconfianza de que están bajo asedio para que otros ocupen el lugar del país en el sector de servicios, especialmente los bancarios.
El ministro de la Presidencia, Álvaro Alemán, afirmó que su país “aceptar que se use a Panamá como chivo expiatorio de las acciones y responsabilidades de terceros".
¿Quién financia qué?
El debate se extiende también a quienes están detrás de las organizaciones que participaron en estas filtraciones.
Nuevamente son los medios rusos, especialmente la agencia de noticias RT, las que apuntan al financiamiento norteamericano, especialmente a la Organized Crime And Corruption Reporting Project (OCCRP).
RT cita al portavoz del Departamento de Estado, Mark Tonner, quien habría reconocido que la organización recibió fondos de la agencia de cooperación norteamericana USAID, si bien –afirmó– “EEUU no tuvo constancia de antemano de los resultados de la investigación de los 'Papeles de Panamá', ya que no se involucró en su trabajo”.
RT asegura también que el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ), que difundió los papeles a través de decenas de medios de todo el mundo, tiene entre sus donantes la Open Society Foundations, de Soros y otras fundaciones, como la Ford o la Rockefeller.
Julian Assange, desde la embajada de Ecuador, en una videoconferencia organizada por el Partido de la Izquierda en el Parlamento Europeo, el 7 de abril recién pasado. Assange criticó el periódico alemán Süddeutsche Zeitung, que recibió los millones de documentos y luego los distribuyó a través del ICIJ, por no haber “querido publicar ni un solo papel de Panamá íntegro por el miedo al litigio que ello conlleva". Pero no apuntó sus críticas al ICIJ sino a la OCCRP, que habría sido efectivamente financiado por Soros y por la USAID.
Afirmaciones que, en todo caso, tampoco permiten deslindar de forma clara los intereses y los objetivos detrás de esta enorme filtración de documentos financieros.