14 de enero 2016
Tapachula.- Los primeros 180 migrantes cubanos amparados por un acuerdo para ayudarlos a llegar a Estados Unidos emprendieron la última etapa de su odisea después de ingresar este jueves a territorio mexicano procedentes de Guatemala. Los 139 hombres y 41 mujeres llegaron este miércoles al suroriental estado mexicano de Chiapas a bordo de cuatro autobuses, custodiados por la Policía Nacional Civil y la Procuraduría de los Derechos Humanos de Guatemala.
Las Naciones Unidas nos reitera su apoyo y acompañamiento en este proceso del tránsito migratorio para cubanos varados en Costa Rica
— Luis Guillermo Solís (@luisguillermosr) January 14, 2016
El procurador de Derechos Humanos en la municipalidad de Coatepeque, José Maldonado, dijo que "el acompañamiento y verificación durante 12 horas" por territorio guatemalteco se llevó a cabo en el marco de un programa piloto tras el acuerdo suscrito con Costa Rica, El Salvador y México para ayudar a los cubanos en su trayecto hacia EE.UU.
Los migrantes fueron recibidos en las instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM) de México para el trámite personal del "documento provisional de visitante por razones humanitarias", que les brinda 20 días para atravesar el país, indicaron fuentes de la institución. El proceso estuvo acompañado por personal de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), la Cruz Roja y varias organizaciones no gubernamentales defensoras de los migrantes.
A su llegada al recinto federal en el paso fronterizo Rodolfo Robles de Ciudad Hidalgo, Chiapas, los viajeros manifestaron su objetivo de llegar a EE.UU. para reunirse con sus familiares, como en el caso de Olanis Díaz, originario de La Habana y quien se verá con su padre en Miami, Florida, después de la dura travesía.
Al cabo de las dos horas que ocupó el trámite migratorio, los cubanos salieron de las oficinas y abordaron otros cuatro transportes, contratados por el INM para trasladarlos unos 45 kilómetros desde Ciudad Hidalgo a Tapachula, donde comprarán pasajes de avión o autobús para continuar su viaje al norte.
Después de estar varados durante dos meses en la frontera de Costa Rica con Nicaragua en medio de una disputa diplomática entre esos países, los cubanos consideraron "un logro su llegada a la frontera sur de México". Desde allí buscarán por cuenta propia llegar a Estados Unidos para alcanzar los beneficios previstos en la Ley de Ajuste Cubano.
Leonel Chirino, un beisbolista de 30 años, quien llegó en el primer autobús, envió un mensaje de "tranquilidad" a los más de 7.000 de sus compatriotas que aún siguen en Costa Rica, de donde el primer grupo partió la noche del martes vía aérea a El Salvador y de allí por tierra a Guatemala y después a México. Les aseguro "que todos van a salir, que todo está bien planeado, que todo está bien coordinado, que nosotros somos los primeros por el visado y todos vamos a llegar a Estados Unidos".
El traslado desde Costa Rica hasta territorio mexicano fue coordinado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). El canciller costarricense, Manuel González, afirmó hoy que el plan piloto para el traslado de migrantes cubanos desde Costa Rica hasta México fue un éxito.
Secretario General de Naciones Unidas nos envió felicitación al pueblo de Costa Rica por los esfuerzos para atender la crisis migratoria.
— Luis Guillermo Solís (@luisguillermosr) January 14, 2016
"Nuestra opinión, que tendrá que tomar en cuenta la de otros países, es que se ha cumplido con todas las expectativas. Las personas han llegado bien, saludables, contentas y a tiempo. Todo ha transcurrido muy bien y esperamos que esto sea lo que también diga la región", dijo en conferencia de prensa. Además, el canciller felicitó a El Salvador, Guatemala y México por la flexibilidad mostrada y añadió que continuarán trabajando "arduamente a favor de todos los migrantes cubanos que quedan en el país".
El próximo 18 de enero está prevista una reunión técnica en Guatemala a la que asistirán representantes de los Gobiernos centroamericanos, para valorar el primer traslado. Desde el 15 de noviembre, cuando Nicaragua cerró su frontera a los cubanos, en Costa Rica se acumularon 7.802 migrantes de la nación antillana que buscan aprovechar la mejora de las relaciones con Estados Unidos para llegar a ese país.