12 de enero 2016
En Nicaragua, no ha querido enseñarse al Rubén Darío “creador de una literatura que interroga, que cuestiona, que propone”, asegura el escritor, investigador, y académico, Erick Blandón.
El Darío que se imparte y reparte en las aulas ha sido, dice Blandón, “el Darío de las Prosas Profanas”, un Darío “superado por el mismo Darío”.
Blandón, es autor del libro ¨Discursos transversales, la recepción de Rubén Darío en Nicaragua¨, publicado en el año 2011.
“No se ha estudiado a otro Darío, ni se quiere estudiar. No creo que en Nicaragua haya espacios para el debate porque hay un miedo a discutir a fondo la obra de Darío, para eso ha habido siempre sepultureros que se han encargado de cuidar que no salga de la fosa que le hicieron aquí en Nicaragua, en León, el verdadero Darío”, asevera Blandón, cuya obra impresa yace en el Banco Central de Nicaragua.
La institución que la financió, no ha distribuido los ejemplares. Tampoco ha permitido su venta. El texto ha sido compartido solamente en PDF.
“Después que salió el presidente Antenor Rosales, no volvió a circular. Lo único que se distribuyó fueron los ejemplares que a mí me dieron como derechos de autor. El libro está en las bóvedas del Banco Central. No sé a qué se debe que el libro no circula”, sostiene.
Esto, pese a que en la presentación del libro se señaló que “el autor se aproxima al poeta nicaragüense desde una perspectiva diferente a los enfoques que han caracterizado los estudios sobre Darío y su obra, entregando una nueva veta para explorar en el multifacético y complejo mundo del conocimiento de la temática rubendariana”.
Blandón habla de un Darío víctima de una supuesta “gran conspiración contra él desde niño”.
“Darío tuvo una visión liberal de la vida, anticlerical, anti conservadora, y todos los gobiernos, desde el gobierno de los 30 años hasta que murió bajo el gobierno de Adolfo Díaz, conspiraron en contra de él. A partir de 1910, Darío queda totalmente desasistido, sin salario y obligado a empeñarlo todo, a venderlo todo y murió esperando que le pagaran su salario”, explica.
Según este académico de la Universidad de Missouri, Estados Unidos, “el gobierno de los conservadores necesitaba un símbolo, necesitaba una figura que cohesionara a los nicaragüenses”, y para ello se usó, a Rubén Darío, una vez que falleció.
El poeta del centenario
A un mes que se cumplan los 100 años de la muerte de Darío, el Gobierno de Nicaragua emitió un decreto en el que establece que el 2016 es el año para celebrar al “Príncipe de las letras castellanas”. Así lo informó la primera dama y vocera gubernamental Rosario Murillo. El decreto es dirigido a todas las instituciones públicas “y al pueblo nicaragüense, a honrar todo el año, ese legado infinito que nos heredó Rubén Darío”, dijo el diputado Edwin Castro a medios oficialistas.
Las distintas instancias estatales, “guiarán su trabajo, inspirándose en la Palabra y el ´Alba de Oro´, de Rubén” reza el escrito.
Se usarán para ello, “Frases, Imágenes que reflejen su Grandeza”, señala. Una directriz que se extiende al sistema educativo del país, a las municipalidades, a “todas las Representaciones del Gobierno de Nicaragua en el Exterior”, que realizarán eventos en todo este 2016, “para honrarle”.
Al Darío que despliega una “literatura cuestionadora”, es al que los nicaragüenses se deben acercar aseguró Blandón.
Convocar a toda la nación sería lo ideal, puntualizó este escritor en la edición del lunes del programa Esta Noche. “Yo creo que sería ideal este momento de reconciliación en torno a la figura de Darío, más allá de las frases (…) evitar homenaje a la fotocopiadora, porque es lo que ha sido. Tenemos que avanzar”, aseveró.
Llamar a quienes están fuera de la esfera pública y hacerlos converger en la obra dariana, es la misión, según Blandón, quien citó ese como uno de los méritos del ex presidente René Shick, cuando en 1966 se celebró el cincuentenario de la muerte del poeta y un año despues el centenario de su nacimiento. “Juntar a todos los opositores, intelectuales del país, para celebrarlo”, recordó. Incluso los movimientos estudiantiles participaron bajo el lema “Año Dariano, sin tirano”, en protesta por la campaña para la elección de Anastasio Somoza Debayle.
El periodista
Rubén Darío como periodista es otra de las facetas que se deben ampliar del autor de Azul.
“Fue el primer latinoamericano que propuso el periodismo como profesión. Que luchó, que pidió, sindicalizar el periodismo”, afirma el académico, quien es severo al insistir que “Darío da para mucho”.
“Han sido muy pobres los simposios que se han realizado, donde se repite lo mismo sin ningún alcance”, afirmó Blandón.
La lucha de Darío por la modernización y autonomía de los países de América Latina es otra de las aristas desde la que se debe conocer al mayor exponente del Modernismo.
¿Qué leer de Darío? Los poemas que Darío escribió a partir de Cantos de Vida y Esperanza, son algunas de las obras que de este nicaragüense deben estudiarse, “y sobretodo las crónicas donde está el pensamiento filosófico de Darío, recopiladas por Gunther Schmigalle para entenderlo”, concluyó Erick Blandón.