15 de diciembre 2015
La Habana.- El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, aseguró este martes en La Habana estar "esperanzado" en resolver la crisis de los 5.000 emigrantes cubanos varados en su país antes de la cumbre del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA), prevista para este viernes en El Salvador.
"Estamos trabajando intensamente en el plano diplomático para lograr acuerdos que permitan la salida de los cubanos del territorio nacional", confirmó a la prensa el mandatario costarricense, de visita oficial en Cuba, donde abordará el tema esta tarde en una reunión con su homólogo cubano, Raúl Castro.
El presidente de Costa Rica se mostró optimista sobre la posibilidad de que en los próximos dos días "sean exitosas" las gestiones para desbloquear la situación de los más de 5.000 cubanos varados en su país, aunque no dio detalles sobre las posibles soluciones que se barajan.
"Esperamos que estas gestiones sean exitosas, (...) creemos que de aquí a pasado mañana, en las vísperas de la reunión de presidentes en El Salvador, puedan darse noticias positivas respecto a estas trámites, que siendo intensos, aún no deparan anuncios significativos respecto a la voluntad de los países involucrados", explicó.
Solís afirmó que su Gobierno sigue "esperanzado en que no solo se reconozca el derecho de tránsito de estos emigrantes", quienes según insiste "han salido de su país debidamente documentados", sino que esta crisis sea vista con una "perspectiva multinacional" en lugar de "un problema bilateral de Costa Rica con otra nación".
El presidente costarricense también dijo estar "defraudado" por la posición adoptada por países vecinos como Nicaragua, Guatemala y Belice, que se han negado a permitir el tránsito a los cubanos, que permanecen varados en Costa Rica desde hace un mes cuando Nicaragua cerró la frontera.
En su intento de llegar a EE.UU -donde las políticas migratorias y la Ley de Ajuste beneficia a los cubanos que lleguen a ese territorio-, la mayoría de los cubanos que emigran emprende un largo periplo por toda Centroamérica, que inician en Ecuador, el único país de la región que no requería visado a los cubanos. Sin embargo, Ecuador exige desde el 1 de diciembre pasado visado de turista a los cubanos que entren en el país, hasta el momento la única medida adoptada para poner freno a ese flujo de emigrantes que recorren 7.700 kilómetros y cruzan ilegalmente ocho fronteras.