17 de septiembre 2015
El Walter Ferretti volvió a caer este miércoles contra el equipo mexicano de las Águilas del América, esta vez 1-3, en el Estadio Nacional de Fútbol de Managua. Con este resultado el equipo nicaragüense se despide de la Concachampions, donde acumula tres derrotas en igual número de partidos.
Dos pinchazos del colombiano Darwin Quintero, y uno más de Michael Arroyo, bastaron para que el emblemático equipo azteca firmara la victoria desde el primer tiempo.
Bernardo Laureiro abrió las puertas de la esperanza para el equipo local al cierre del primer tiempo. Eulises Pavón se desmarcó dentro del área, se abrió por el costado izquierdo y lanzó el pase en diagonal, al vacío, donde sólo Laurerio podía llegar, frio, rasante, letal.
El gol puso el estadio a cantar. Los aficionados volvieron a creer en el equipo que le plantó cara a este mismo rival en México, en el mítico Estadio Azteca. La afición se volcó en busca de una inyección de ánimo para el grupo de muchachos del representante nacional.
El marcador señalaba la mínima diferencia. Pero Quintero se encargó de hacer añicos el impulso nicaragüense, minutos más tarde. El habilidoso jugador piso la pelota dentro del área y disparó hacia el único ángulo que le quedaba. Denis “el pulpo” Espinoza, portero nicaragüense, no pudo parar el rayo que paralizó el marcador.
Quintero lo hizo otra vez. Ya lo había hecho al minuto 18 para abrir el marcador. En esa ocasión, después de ganarles las espaldas a los defensores, controló la pelota y le pegó fuerte, bañando al “pulpo”, que no se pudo colgar del balón.
Ocho minutos después del gol de Quintero, el árbitro sentenció un penal a favor de los mexicanos. Arroyo, verdugo en el juego en México, volvió pegarle con frialdad al balón desde los once pasos, para poner el partido en el congelador.
El segundo tiempo tan sólo fue un trámite. El equipo mexicano sólo hizo lo necesario para llevarse la victoria. Y nada más. El control de balón por ratos perteneció a los locales, que buscaron desde todos los espacios el resultado positivo.
La garra de los nacionales no bastó para conseguir una voltereta gloriosa. Hubo disparos desde lejos. Llegadas sin claridad, con empuje, pero sin ideas. De ahí hasta que el árbitro pitó el final.
Un equipo nicaragüense no ha logrado ganar en este campeonato. Real Estelí obtuvo cuatro empates. El Ferretti intentará la primera victoria el próximo jueves 24 de septiembre contra el Motagua de Hondura, en el último partido en este torneo