3 de septiembre 2015
La posibilidad de que algún día se construya Tumarín o el Canal Interoceánico interesa a una empresa como Cemex de Nicaragua, pero no condiciona su decisión de invertir en el país, aseveró Yuri de los Santos Llamas, Director País de Cemex Nicaragua y El Salvador, en el segmento ‘Cuentas Claras’ del programa de TV ‘Esta Noche’, que se transmite por Canal 12.
“La construcción de la Fase 1 y la Fase 2 de nuestra nueva planta de producción [en el municipio de Ciudad Sandino], no están condicionadas por la posible construcción del Canal Interoceánico, porque ese es un proyecto tan grande, que igual no se podría satisfacer” con la capacidad instalada que existe en el país, explicó.
Hace una semana, las más altas autoridades de Cemex a nivel mundial, regional y nacional, inauguraron la Fase 1 de su nueva planta de molienda de cemento, a un costo de US$30 millones, lo que les permitirá incrementar en 220,000 toneladas su capacidad de producción actual, calculada entre 420,000 y 440,000 toneladas.
Está previsto que en el 2017 se inaugure la segunda fase a un costo de US$25 millones, para sumar otras 220,000 a su capacidad de molienda anual, con lo que prácticamente se habrá duplicado la capacidad de la que la empresa disponía en su planta original en San Rafael del Sur.
Esa inversión de US$55 millones para completar las dos fases de ampliación de su capacidad productiva responde a la estrategia de estar listos para responder al crecimiento esperado de la demanda a lo largo de los próximos diez años, explicó de los Santos, pensando en el “dinamismo constante”, de la economía nicaragüense, que la empresa ha observado en los últimos años.
“El crecimiento del sector de la construcción es importante en sí mismo, y justifica esta inversión, aún sin Tumarín y el Canal Interoceánico”, precisó ante una pregunta del periodista Carlos Fernando Chamorro, director del citado programa televisivo, así como de este Diario Digital. Con todo, “creemos que Tumarín debe ‘detonar’ (arrancar) en el corto o mediano plazo”, confió.
El ejecutivo duda que la construcción pueda mantener el buen momento (31.3%, según el Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE), del primer semestre del 2015), y prevé una estabilización del crecimiento del sector a mediano plazo, en la medida en que se vayan llenando los rezagos en infraestructura que todavía padece el país.
Junto a los proyectos de construcción de hoteles, centros comerciales, naves industriales, hospitales, escuelas y proyectos de vivienda, el rubro también apuesta porque el país se decida a construir más carreteras de concreto (como la que conectará con Bluefields y la que llevará hasta Mulukukú). Aunque representan una mayor inversión inicial, el costo de mantenimiento se reduce de manera significativa por los siguientes 20 años.
El administrador refirió que el autoconsumo representa el destino final de la mayor parte de su producción de cemento. “Hasta hace unos años vendíamos ‘a saco’ entre el 90% y el 95% de nuestra producción, pero cada vez vemos mayores niveles de industrialización, elaboración de prefabricados, lo que implica un crecimiento de la demanda, de modo que en este momento, el autoconsumo representa el 85% de nuestras ventas”, detalló.