15 de julio 2015
El Consejo Nacional para la Defensa de la Tierra, Lago y Soberanía Nacional, el Grupo Cocibolca y la Academia de Ciencias de Nicaragua (ACN) entregaron este miércoles a los obispos de la Conferencia Episcopal una “carta abierta” en la que alertan de los daños sociales y ambientales que causaría la construcción del Canal Interoceánico, aprovechando la sincronía entre su reclamo y la Encíclica del papa Francisco Laudato Si sobre el “cuidado de la casa común”.
“En Laudato Si hemos encontrado mensajes muy oportunos para iluminar la encrucijada en la que han colocado hoy a nuestro país y nuestro pueblo con el proyecto del Canal Interoceánico, los sub-proyectos asociados y la Ley de la concesión canalera”, sostiene el documento entregado a los obispos por varios campesinos del movimiento anti canal, que viajaron hasta el municipio de El Ayote, en la Región Autónoma del Atlántico Sur, donde está reunida la Conferencia Episcopal.
Nemesio Mejía, líder del movimiento anti canal en Nueva Guinea, dijo que los obispos los recibieron aproximadamente quince minutos. “No fue una reunión formal, pero les dimos el documento y fuimos bien recibidos”, narró el campesino.
El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, Monseñor Silvio Báez, dijo en su cuenta de Twitter que en la reunión de la Conferencia Episcopal “conversan sobre diversos tópicos de Iglesia y realidad del país”.
Mejía relató que los obispos les dijeron que analizarían la “carta abierta” y, a la vez, les expresaron que su “lucha valía la pena”. “Los señores obispos recomendaron que mantuviéramos la calma, que evitáramos choques de las personas que los provocaran, porque nos podían involucrar en problemas. Que estuviéramos precavidos”, aseguró el líder campesino.
En el documento entregado a los obispos, el Consejo Nacional para la Defensa de la Tierra, Lago y Soberanía Nacional, el Grupo Cocibolca y la Academia de Ciencias de Nicaragua (ACN) subrayaron que el Papa Francisco cuestiona de manera franca el severo riesgo que representa la entrega de concesiones de este tipo sin la existencia de estudios serios previos, “como lamentablemente ocurrió en el caso del proyecto canalero, ya hace dos años”.
“Francisco nos invita a un debate interdisciplinario para evaluar éticamente los riesgos ambientales, sociales, culturales y políticos que encierra este proyecto”, agrega la misiva pública.
Según Mejía, ellos hicieron un llamado especial al obispo de Bluefields, Pablo Smith; al obispo de Juigalpa, Sócrates René Sándigo; y al obispo de Granada, Jorge Solórzano, porque serán sus diócesis las más afectadas por el trazado de la ruta canalera.
“El proyecto canalero tal y como está planteado, arrasa con la forma de vida de los pueblos indígenas, afrodescendientes y campesinos, y con la mayor reserva de agua dulce de Nicaragua y Centroamérica”, asegura la “carta abierta”.
Mejía añadió que los obispos de la alta jerarquía católica les recordaron que ellos ya habían expresado su preocupación por la dimensión ecológica que tendría el proyecto del Canal Interoceánico, y los campesinos y productores que serían afectados por la mega obra que empuja el comandante Ortega y el empresario Wang Jing, en la carta pastoral emitida durante la cuaresma de este año.