23 de julio 2019
En medio de la persecusión y el Estado de sitio impuesto por el régimen Ortega-Murillo, la prensa independiente de Nicaragua, que lucha contra la censura, sigue siendo reconocida a nivel internacional.
“Esta es una prueba más de que se está venciendo la censura, es un respaldo que nos da la comunidad internacional. Mientras a los Ortega-Murillo se les ha sancionado, a los periodistas independientes se les ha premiado, a nivel internacional”, dijo en el programa Esta Semana, con Carlos F. Chamorro, la periodista Lucía Pineda Ubau, jefa de información del clausurado y confiscado 100% Noticias y presa política excarcelada que actualmente se encuentra en Costa Rica.
La valentía y compromiso por informar la verdad fue reconocida desde 2018, cuando la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), otorgó en octubre, el Gran Premio Libertad de Prensa 2018, que recibió Miguel Mora, director de 100% Noticias, en nombre de toda la prensa nacional. Y han continuado con el premio de periodismo Rey de España a Wilfredo Miranda, periodista de Confidencial, por su investigación: Disparaban con precisión a matar. Asimismo, los periodistas Miguel Mora y Lucía Pineda Ubau, de 100% Noticias, ganaron el Premio Internacional de la Libertad de Prensa de 2019, del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
Lucia Pineda, también también fue galardonada con el premio al Coraje en el Periodismo 2019, reconocimiento que otorga la Fundación Internacional de Mujeres Periodistas (IWMF, por sus siglas en inglés) y recientemente, Pedro X. Molina, se convirtió en el tercer nicaragüense en ser galardonado con el premio internacional más antiguo del periodismo: el premio María Moors Cabot, que otorga la Universidad de Columbia, de New York, Estados Unidos
Periodistas comprometidos con su labor
Estos cinco premios internacionales, representan un reconocimiento a la calidad y el coraje de la prensa independiente de Nicaragua, que en las horas más oscuras, ha continuado reporteando la verdad y escribiendo páginas luminosas, aún con la confiscación de estos dos medios de comunicación y la encarcelación de dos reconocidos periodistas, aseguró Chamorro.
“Estos premios, también ayudan a visibilizar un poco la situación del periodismo en Nicaragua, para que la comunidad internacional, no vuelva a ver a otro lado y mantenga sus miradas al país. Y que digan que el periodismo nicaragüense es valiente, tiene coraje, te compromete más con la gente, con las audiencias y con nuestro trabajo”, añadió Pineda.
Wilfredo Miranda comentó que el reconocimiento a su labor periodística, en su caso, se da porque el trabajo premiado se convirtió en prueba irrefutable de que la dictadura estaba ordenando disparos letales y estaba utilizando armas de alto calibre.
“Nosotros publicamos esta investigación el 26 de mayo de 2018, incluso antes que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), presentara su primer informe y logramos corroborar por primera vez que el gobierno de Daniel Ortega estaba usando francotiradores y que estaban cometiendo ejecuciones extrajudiciales”.
El periodismo debe seguir firme
“Yo no empecé a criticar y a dibujar sobre los abusos de este gobierno el 18 de abril, dibujé mucho antes, sobre los gobiernos anteriores y luego también sobre este gobierno. Ahora yo espero que estos premios en su generalidad, inspiren y cómo decía Lucía ayuden a confirmarle a todos los que estamos haciendo periodismo independiente, que estamos haciendo lo correcto, que estamos haciendo las cosas como se debe y que debemos seguir haciéndolas”, comentó Pedro X. Molina.
Este compromiso de seguir publicando la verdad, también obedece a la necesidad que tiene la audiencia por escuchar la verdad, según Pineda. “A la dictadura las cosas le salieron al revés, nos querían silenciar, pero más bien las voces se multiplicaron. La gente sigue a los periodistas y los medios que le están contando la verdad de lo que está ocurriendo en Nicaragua, no sigue las mentiras que emite el gobierno en sus medios de propaganda”, sostiene Pineda.
Miranda por su parte, considera que en este sentido, la rebelión cívica ha revalidado esa comunión que existe entre la audiencia y el periodista, pues han sido muchos quienes con su celular y desde las redes sociales han registrado los hechos como reportes ciudadanos, ayudando también la labor del periodista y contrarrestando las mentiras del régimen.
“Si hay una batalla, obviamente la dictadura la va perdiendo, porque cada vez, la realidad es tan terca, todo lo que ha pasado es tan evidente, tan palpable y hay tantas pruebas que el discurso al que ellos tienen que recurrir de la mentira, la manipulación y el engaño cada vez es menos efectivo. La gente misma te envía los videos donde desenmascara las mentiras del monólogo oficial y lo que uno quiere es canalizar esa idea, incentivar el debate y ser la voz de ellos”, considera Molina.