14 de mayo 2019
La contratación que hizo la Cancillería del régimen Ortega-Murillo de dos prófugos de la justicia salvadoreña, el expresidente Mauricio Funes y su hijo, liquida el escalafón diplomático en el país y evidencia el empleo del Ministerio de Relaciones Exteriores para arreglos entre mafiosos, según exdiplomáticos nicaragüenses.
El exembajador alterno de Nicaragua ante la OEA, Mauricio Díaz, dijo que el hecho de haber incluido a Funes y a su hijo, Diego Roberto Funes Cañas, en la planilla de Cancillería significa de parte del régimen Ortega-Murillo el “otorgarle protección por sus pistolas” a personajes que están acusados de corrupción y malversación de fondos.
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“Desde que no respetan la Ley de Servicio Civil y Carrera Administrativa, el Gobierno ha hecho lo que ha querido. Acabó con el escalafón diplomático y todo lo ha sumido a criterios partidarios y de lealtad personal”, criticó Díaz. “No sé cuál es el trato de Ortega y los Funes, quienes están acusados de corrupción, pero ponen de manifiesto el irrespeto total a todo. Es la protección de alguien por sus pistolas. Es como la Cosa Nostra”.
El expresidente Funes, prófugo de la justicia y asilado en Nicaragua desde septiembre de 2016, devenga un salario de 90 080.46 córdobas (unos 2739 dólares al cambio oficial) en la Cancillería de Nicaragua, según una planilla de esa institución en poder de Confidencial.
El documento no expone el concepto del pago a Funes, aunque confirma que al menos uno de sus hijos, Diego Funes Cañas, se encuentra en la planilla oficial y revela una dirección domiciliar imprecisa en Managua.
Según la información, padre e hijo poseen el mismo domicilio, que con imprecisión cita: “I etapa 2 cuadras este 1 1/2 cuadra norte casa No. 1”. Aunque se sabe que los Funes viven en el exclusivo Reparto de Las Colinas, custodiados por escoltas de la Policía Nacional.
Procesos en El Salvador
Funes está prófugo de la justicia desde 2016. En El Salvador tiene un proceso judicial abierto por el desvío y blanqueo de $351 millones de la partida de gastos reservados de Presidencia de la República y otros cuatro procesos judiciales por sobornos, peculado y lavado de dinero. En uno de esos otros cuatro casos, Funes es perseguido por el pago de sobornos al exfiscal general Luis Martínez, para evitar las investigaciones. En septiembre de 2016, el Gobierno de Ortega decidió otorgarle asilo político a Funes y a su familia en Managua.
En enero de este año , la Corte salvadoreña ordenó la detención de Funes por revelar un documento secreto del Departamento del Tesoro de Estados Unidos sobre un millonario desvío por el que fue procesado el difunto exmandatario Francisco Flores (1999-2004).
Sin embargo, desde junio de 2018, el juez titular del Juzgado Quinto de Instrucción de San Salvador ordenó la emisión de una orden de captura internacional contra Funes, dos de sus hijos, su cónyuge y 11 prófugos más, vinculados con la trama de corrupción. Funes se ha refugiado bajo la dictadura de Daniel Ortega, cuestionada por violar tratados internacionales sobre corrupción.
Más reciente, en abril de 2019, la Corte Suprema nicaragüense denegó una solicitud de extradición solicitada por su par salvadoreña, alegando que precisamente Funes goza de asilo en Nicaragua y por lo tanto la solicitud era improcedente.
Nayib Bukele, presidente electo de El Salvador, también denunció en su cuenta de Twitter este domingo que el hijo de Funes, Diego Roberto Funes Cañas, recibe un salario de Cancillería por la suma de 47 250 córdobas (unos 1 450 dólares).
Afiliados al INSS
La planilla de Cancillería en poder de Confidencial también expone los números de empleados de ambos prófugos de la justicia salvadoreña con los que cotizan ante el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS). El expresidente Funes posee el número de asegurado 34673423 y su hijo Diego el 35206154.
Confidencial también posee una constancia de la “División de Recursos Humanos” de la Cancillería en la que se da cuenta que Funes Cañas labora en esa institución desde el 4 de septiembre de 2017. El cargo que ocupa es de “Asesor Técnico en el Despacho del Ministro Asesor para Políticas y Asuntos Internacionales”. Este otro documento lo firma Ernesto Picado González.
Funes Cañas es señalado por la Fiscalía salvadoreña de manejar de forma indebida $376 mil 777.31 dólares. Las investigaciones aseguran que el hijo del exmandatario realizó 63 viajes de placer en los que iba acompañado por su novia y un grupo de amigos, y todos eran escoltados por un agente de seguridad del Estado Mayor Presidencial. Los destinos que visitaron fueron Panamá (21 veces), Alemania (8), Francia (8), Holanda (7), Guatemala (7), Argentina (6), Brasil (5) y Estados Unidos (1).
“Están en una situación penosa”
Francisco Aguirre Sacasa, excanciller de Nicaragua, dijo que el hecho de que Funes y su hijo hayan aceptado salarios que, sumados no sobrepasan los 5 000 dólares, denota “que están en una situación penosa”.
"Para ellos cuatro mil dólares debería ser poco, pero al parecer están en una situación tan penosa que aceptan esa suma. Porque esta información iba a salir tarde o temprano”, dijo Aguirre Sacasa. Según el excanciller, el hecho que el Gobierno de Ortega haya decidido ingresar en planilla a los Funes recrudecerá más la posición de El Salvador en la OEA para condenar a su Gobierno.
¿Qué hace Funes en Cancillería?
En El Salvador, Fuentes periodísticas que han investigado a Funes creen que podría estar en la quiebra, ya que los testaferros que ha usado “lo han estafado”.
En el caso del expresidente Funes, no se conoce cuáles son las funciones que le habría asignado el titular de la cancillería Denis Moncada, jefe de la delegación negociadora de la dictadura Ortega-Murillo en el diálogo con la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia.
El presidente electo, Bukele, criticó la contratación del hijo de Funes: “47 000 córdobas al mes, de un pueblo con tantas necesidades, a un prófugo de la justicia, hijo de otro prófugo de la justicia”, escribió Bukele, quien no acostumbra a dar declaraciones a los medios de comunicación.
El canciller de la dictadura Ortega-Murillo, Denis Moncada, evitó referirse a la denuncia de Bukele la mañana de este lunes, antes que Confidencial confirmara que también el expresidente Funes recibe un sueldo del estado nicaragüense. Moncada asistió a una reunión con la Alianza Cívica y a su salida se mostró nervioso ante las preguntas de los reporteros, quienes cuestionaban la contratación de Funes Cañas.
Bukele publicó la información del hijo de Funes en respuesta a la crítica que hizo el expresidente a la futura canciller del Gobierno electo, Alexandra Hill Tinoco. Funes tildó a la nueva funcionaria como “sumisa a los intereses de Estados Unidos”, al mismo tiempo que la acusó de justificar los insultos de Donald Trump.
El pago del expresidente Funes es el casi el doble que el de su hijo. En ambos casos, sus salarios son entre tres y seis veces más altos que el salario mínimo promedio de los nicaragüenses, sumidos además en una crisis política, social y económica tras la matanza y represión orteguista contra las protestas ciudadanas, que ha dejado a casi medio millón en el desempleo.
“Nayib en lugar de ocuparse de los salarios en Nicaragua debería estar trabajando en una tabla de salario mínimo para El Salvador”, alegó Funes en su cuenta de Twitter, ocultando que él también recibe un salario en la cancillería nicaragüense.