25 de enero 2019
Dos altos representantes del Departamento de Estado y una misión de once diputados del Parlamento Europeo coincidieron en Managua desde este miércoles, mientras el régimen aumentaba la militarización de la ciudad, en un esfuerzo paralelo para demandar el retorno de Daniel Ortega al Diálogo Nacional, suspendido desde hace más de seis meses.
- Alianza Cívica exige reinstalación del Diálogo Nacional
- OEA pide a Ortega volver al Diálogo Nacional y adelantar elecciones
- Ortega no responde a petición de la CEN de reanudar el Diálogo
Michael McKinley, asesor principal del secretario de Estado, Mike Pompeo, y Julie Chung, subsecretaria principal adjunta de la Oficina del Hemisferio Occidental, sostuvieron un encuentro de casi tres horas con Ortega y Murillo, para “recalcar el continuo apoyo de los Estados Unidos a los esfuerzos por encontrar una solución pacífica a la crisis en Nicaragua, el retorno a la democracia y la protección de los derechos humanos”, según una nota de la embajada estadounidense.
Una fuente diplomática reveló que el mensaje de McKinley a Ortega fue categórico sobre el clamor nacional de que cese la represión: “Pare la matanza, los asesinatos y las detenciones, y libere a todos los presos políticos”, recalcó el enviado. Asimismo, el asesor del secretario de Estado de Estados Unidos coincidió con la demanda nacional a Ortega de que debe “realizar reformas electorales, políticas y judiciales, y efectuar elecciones libres antes de 2021”.
No se conoce cuál fue la reacción de Ortega y Murillo ante el planteamiento de Estados Unidos, ni si este intercambio estableció las bases de un diálogo bilateral entre el régimen de Ortega y la Administración de Donald Trump.
Fuentes diplomáticas revelaron que previo a la llegada de Mckinley, se produjo un intercambio entre el asesor presidencial para asuntos económicos Bayardo Arce y el embajador norteamericano Kevin Sullivan, y posteriormente, Murillo entró en contacto con el embajador norteamericano. “No tengo información para afirmar que la visita de Mckinley forma parte de un diálogo en curso, pero es obvio que se han realizado contactos previos”, dijo la fuente.
Amplia experiencia
McKinley y Chung también se reunieron con representantes de la Iglesia católica, sector privado y organizaciones de la sociedad civil.
Ambos funcionarios tienen un amplio conocimiento de la política latinoamericana. McKinley ha sido embajador de Estados Unidos en Brasil, Colombia y Perú. Nacido en Venezuela, el diplomático ha servido también en Bolivia, Afganistán, Mozambique, Uganda, Bélgica e Inglaterra, según la página web del Departamento de Estado.
Chung “se desempeñó como consejera política adjunta en Bogotá, Colombia, donde dirigió el programa de extradición más grande del Gobierno de los Estados Unidos, incluidos los casos de paramilitares y narcotráfico”, según el Departamento de Estado.
Eurodiputados inician encuentros
Mientras la Policía del régimen arreciaba la militarización de Managua y realizaba detenciones arbitrarias en distintos puntos, un grupo de eurodiputados, encabezados por el parlamentario Ramón Jáuregui (del PSOE, de España) se reunió también este jueves con diversos sectores de Nicaragua, con el fin de evaluar la crisis sociopolítica que vive el país desde abril pasado y que ha dejado cientos de muertos y de detenidos, así como apoyar un proceso de diálogo para restaurar el orden democrático en esta nación.
La delegación que integran once eurodiputados de seis grupos políticos del Parlamento Europeo (PE), se entrevistó también con el canciller nicaragüense, Denis Moncada, y la viceministra de Cooperación, Arlette Marenco.
El objetivo de la misión es conocer de primera mano qué ha sucedido en el país desde abril pasado, cuando inició la crisis sociopolítica, que ha dejado al menos a 325 ciudadanos asesinados por el régimen, más de tres mil heridos, más de 600 presos políticos y unos 60 000 exiliados por la persecución política.
El régimen había suspendido la visita de los eurodiputados, pero luego se retractó, ante el endurecimiento del discurso de la UE contra la dictadura orteguista y el anuncio de la posibilidad con sanciones contra el Gobierno de Ortega y Murillo.
Los eurodiputados, que brindarán detalles de su visita hasta una conferencia prevista para este sábado al mediodía, también sostuvieron encuentros con el presidente de la Asamblea Nacional, el oficialista Gustavo Porras, así como con representantes de partidos de la oposición, de organizaciones de la sociedad civil, y defensores de derechos humanos.
"La delegación del #PE está ya trabajando en #Managua. Reuniones con todos: Gobierno, Parlamento, Sociedad civil, partidos, Ong. Ver y oír para después ayudar al pueblo de #Nicaragua", informó Jáuregui en su cuenta de Twitter.
"Haremos públicas nuestras impresiones al final: el sábado al mediodía", agregó.
Los eurodiputados también tienen previsto reunirse con Ortega.
Evaluar la crisis
En sus comunicaciones preliminares, el grupo ha dicho que el objetivo de la visita es "evaluar la crisis política y social que atraviesa Nicaragua y apoyar un proceso de diálogo para restaurar el orden democrático en el país".
El Parlamento Europeo condenó en mayo "la represión e intimidación de manifestantes pacíficos", al tiempo que denunciaba "el deterioro de la democracia y el Estado de derecho en Nicaragua, acompañado de creciente corrupción, a menudo implicando a familiares del presidente Ortega".
Además, el pleno de la Cámara instó al Gobierno de Ortega a respetar los derechos humanos y pidió elecciones justas y creíbles.
Mientras el pasado lunes los ministros de Exteriores de la UE condenaron la "represión" en Nicaragua y se mostraron dispuestos a tomar medidas para favorecer una solución "pacífica y negociada" a la crisis y responder al deterioro de la situación de los derechos humanos y el Estado de derecho.