18 de diciembre 2020
Tras la excarcelación de los presos políticos Juana Estela López, de 59 años, Justo Rodríguez, de 67, y Margarito García, de 49, este viernes 18 de diciembre, la cifra de presos políticos del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo en Nicaragua es de 106, pese a la demanda de Navidad sin presos políticos a la que el Gobierno ha respondido con más asedio y persecución.
“Estoy alegre porque estoy en mi hogar, pero también estoy triste porque sé que se quedaron mis hermanos todavía en esas mazmorras y no se merecen estar allí. Así que sigo pidiendo la liberación de todos ellos”, dijo vía telefónica el reo político Margarito García, tras llegar a su casa en Juigalpa, Chontales.
Según la vicepresidenta y vocera del régimen, Rosario Murillo, este 18 de diciembre fueron liberados 1004 presos —933 hombres y 71 mujeres—, pero los reos de conciencia no fueron la prioridad, como demandan familiares y organismos de derechos humanos, entre ellos la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
De acuerdo con el último informe de la CIDH sobre Nicaragua, entre el 18 de abril de 2018 y el 31 mayo de 2020, el régimen de Ortega encarceló al menos 1614 personas, de estos más de cien siguen en las cárceles.
“Nosotros estimamos 109 personas detenidas, y eso es bastante preocupante. Desde el 31 de mayo ha habido una intensificación de personas detenidas por razones políticas, considerando que, además, estamos en tiempo pandémico donde la gente está saliendo mucho menos”, expresó Antonia Urrejola, relatora de la Comisión para Nicaragua, en una entrevista en el programa Esta Noche, con el periodista Carlos F. Chamorro.
Familiares de presos políticos no fueron avisados
La liberación de los tres presos políticos ocurrió la mañana de este viernes, sin el aviso previo a sus familiares. A Juana Estela López la sacaron de su celda a la una de la madrugada y posteriormente la llevaron hasta la Isla de Ometepe, de donde es originaria. Su familia lo supo porque en el trayecto fue reconocida por algunas personas y estas avisaron de su liberación.
“Yo no estaba en la isla, pero una prima me confirmó que la tenían en la estación de bomberos. Hablé con ella y me dijo que gracias a Dios estaba bien y que estaba muy contenta”, relató su hija, Norely Mora.
En los meses previos a su liberación, López había estado mal de salud, ya que padece de hipertensión y tiene un desgaste en su rodilla que le impide caminar sin ayuda. “El problema es que mi mamá, desde pequeña, padece de escoliosis, y a esto se le ha sumado su artrosis en su rodilla”, comentó Norely.
López había estado detenida desde el 19 de abril de 2020, cuando fue arrestada junto con los isleños Amílcar Cerda Cruz, Edwin Javier Mora Cajina, Edman Jean Carlos Mora Ortiz y Justo Emilio Rodríguez López, quienes organizaron una protesta. Al momento de su detención, fueron fuertemente golpeados por la Policía Nacional.
Justo Rodríguez, preso político hospitalizado también fue liberado
De ese grupo, también fue excarcelado el preso político Justo Rodríguez, quien está internado desde septiembre pasado en el Hospital Lenin Fonseca de Managua, pues en el penal La Modelo, su salud se deterioró hasta que sufrió un derrame cerebral y tuvo que ser conectado a un respirador artificial. Aun con su delicada condición de salud, el régimen no lo liberaba.
Sin embargo, este viernes, según explicó la abogada Yonarqui Martínez quien lleva su caso, fue entregado a sus familiares y quedó bajo el cuido de los médicos, pues aún está internado.
“El personal del sistema penitenciario y oficiales de policías abandonan el Hospital Lenin Fonseca, don Justo Rodríguez queda bajo cuidados médicos y en manos de familiares. Escuchar su voz fue impactante. Cambió su semblante al verse sin custodias”, dijo Martínez.
Rodríguez es uno de los 41 reos a los que la CIDH les otorgó medidas cautelares en noviembre pasado. Y su caso fue conocido por el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL), que este viernes celebró su liberación y pidió cese a la persecución de los opositores.
“Junto a la comunidad internacional, esperamos que ni él, su familia ni ninguna otra persona excarcelada vuelva a sufrir ningún tipo de hostigamiento y seguimos exigiendo la liberación de todos los presos políticos”, dijo CEJIL en sus redes sociales.
Presos políticos fueron trasladados solos y con amenazas
La liberación de los más de 1000 presos ocurrió en un acto político realizado en La Modelo y contó con la participación de sus familiares. Sin embargo, los reos de conciencia fueron trasladados por aparte y recibieron amenazas de volver a incluirlos si seguían oponiéndose al Gobierno de Ortega.
“A mí me sorprendieron porque llegaron al lugar donde yo estaba y me dijeron “vení para acá”. Yo pensé que era como siempre que me llegaban a tomar fotos y en eso me metieron a un cuarto oscuro, me dijeron que me quitara la ropa y me dieron unos pantalones viejos y me vinieron a dejar a mi casa en un carro oscuro”, contó García desde su casa, en Juigalpa.
En el trayecto, explicó García, los oficiales le dijeron que no siguiera “hablando en contra” del Gobierno, porque sino “sería detenido nuevamente”.
A la familia de la rea de conciencia, María Esperanza Sánchez, originaria de Matagalpa, le han llegado rumores de que sería liberada hoy. Sin embargo, nunca llegó a su casa. Su familia la esperó con globos y murales, pero no supieron qué ocurrió. Según contó la presa política, Juana López, ella estaba detenida en la misma celda que Sánchez; sin embargo, solo a ella le ordenaron salir.
Régimen intensifica persecución contra familia presos políticos
En paralelo a esta liberación, la Policía Nacional recrudeció el asedio y la persecución contra familiares de los presos políticos, quienes se han organizado para exigir la liberación de los reos políticos.
Este viernes, desde las siete y treinta de la mañana, agentes policiales cercaron las entradas de la casa de Hancy Alemán, hermana del preso político Brayan Alemán. En ese domicilio se realizaría una vigilia organizada por los familiares de presos políticos.
En la vivienda, se encontraba ella con su mamá y sus tres hijos, cuando cinco patrullas policiales llegaron con una orden de captura, según le dijeron: “por publicar contra el Gobierno”.
Sin embargo, para ella la razón del asedio es que se filtró la información de que en la noche se reunirían un grupo de familiares de presos políticos para realizar una vigilia.
“Andaban un documento que no me presentaron, solo traían una hoja que era grande y una orden en contra mía, ya venían preparados con un tubo para romper el portón, porque saben que aquí se mantiene encadenado. Mi mamá les dijo que ya no vivía ahí. El comisionado amenazó que si hacían la vigilia me iban a buscar adonde fuera”, explicó Alemán.
“Me tuve que tirar el muro para ir a visitar a mi hermano”
Una de las participantes de la vigilia sería Karen Lacayo, hermana de Edward Lacayo “la Loba”, quien desde hace más de 15 días ha sido acosada por la Policía del régimen. A ella y su mamá le han impuesto “casa por cárcel”. “Mi mamá Estela Rodríguez ha entrado en depresión profunda y ha desmejorado de la diabetes”, afirmó.
“El martes que me tocaba visitar a mi hermano, me tuve que tirar como los gatos (un muro), para poder salir, porque no me dejan ir a dejarle paquetería a mi hermano”, comentó Karen.
La tarde del pasado jueves, fue recapturado el activista de redes sociales Kevin Monzón, conocido por publicar videos contra la dictadura desde la plataforma Tick tock. Aún se desconoce el por qué de su detención. Él está preso en la estación cinco de Managua, horas antes de su encarcelamiento hizo publicaciones en pro de la liberación de los reos de conciencia.
Ricardo Baltodano fue otro opositor asediado; efectivos policiales se apostaron en la entrada de su casa para impedir que saliera a trabajar. Jonathan López, excarcelado político y sobreviviente del ataque de la divina misericordia, también denunció en redes sociales que dos patrullas policiales cercaron su casa para impedirle salir.