27 de mayo 2020
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A diez metros del féretro del periodista Gustavo Bermúdez, de Radio Corporación, Irma Bermúdez Lacayo llora la muerte inesperada de su padre. Su dolor, afirma Irma, es tan grande como la impotencia que siente al no poder acercarse a verlo por última vez. El periodista de 65 años, falleció por diagnóstico de covid-19, aunque los médicos del hospital luego entregaron un acta de defunción que describe como causa "neumonía atípica grave".
Entre gritos de impotencia y dolor, la hija del periodista Gustavo Bermúdez denunció que el jueves 21 de mayo las autoridades del Hospital Bautista, donde fue hospitalizado su padre, le notificaron que el Ministerio de Salud (Minsa) le practicó una prueba de covid-19. La prueba "salió positiva", pero ayer martes 26 de mayo "cuando que mi papá falleció, me dieron la epicrisis y el doctor me dijo que (la causa de muerte) era covid-19, pero que ellos tenían prohibido poner eso en el acta, que yo tomara mis medidas en la casa", dijo.
El cuerpo del periodista fallecido fue retirado del Hospital Bautista, de Managua, por cuatro empleados de una funeraria, quienes trasladaron el féretro hasta el cementerio Jardines del Recuerdo, en Ticuantepe. Los cuatro hombres que llevaron el féretro vestían trajes negros, completamente herméticos, mientras la familia observaba a varios metros de distancia. Luego de dejar el cuerpo, los hombres fumigaron el vehículo, mientras una pala mecánica selló completamente la sepultura.
Gustavo Bermúdez educaba sobre la pandemia
La voz incunfundible de Gustavo Bermúdez, sonó por última vez hace un par de semanas en su programa “Impacto 540”, que se transmite en la Radio Corporación, por lo que sus colegas y familiares sospechan que pudo contagiarse del virus mientras hacía alguna entrevista.
Bermúdez "fue un hombre muy sano, toda su vida fue vegetariano, él no padecía de nada y resulta que ahora lo declaran con una neumonía atípica, eso es falso", reclama Aida Bermúdez, hermana del periodista.
“Él educaba sobre la pandemia a cada momento, en su introducción siempre agregaba la banderita de prevenir del covid-19, insistió, hacía que todos sus invitados se refirieran a la prevención, participó en algunas grabaciones sobre cómo prevenir el coronavirus, lo tomó de manera personal”, dijo a la agencia Efe el también periodista de Radio Corporación, Alfredo Salinas.
Aunque en el acta de defunción la causa de muerte apareció como “neumonía atípica grave”, los familiares y compañeros de trabajo de Gustavo Bermúdez sostuvieron que fue por covid-19, una causa que los médicos tienen prohibido determinar, según denunciaron, y que coincide con señalamientos previos de la Unidad Médica Nicaragüense.
“Hicimos la denuncia en la radio, dijimos que la causa de muerte era esa (covid-19), porque la familia pidió que se denunciara, porque (las autoridades) están engañando al pueblo”, sostuvo Salinas.
Otros seis periodistas afectados
La organización de Periodistas Escritores y Narradores (PEN-Nicaragua) lamentó el fallecimiento de Bermúdez y alertó que al menos seis periodistas independientes están contagiados de coronavirus. La situación de los reporteros, cuyos nombres fueron reservados, es bastante complicada, afirman, debido a que "no pueden acudir a hospitales públicos, de por sí ya colapsados, debido al temor de sufrir represalias por parte de las autoridades de Salud". La mayoría de estos colegas carecen de recursos para asumir los elevados costos del tratamiento para coronavirus en los hospitales privados.
El organismo también hizo "un llamado de auxilio a los centros PEN y organizaciones internacionales de periodistas" para visibilizar y denunciar la "situación de indefensión" que están viviendo los comunicadores, escritores y nicaragüenses en general, a fin de poder crear una red de apoyo internacional frente a la pandemia.
De igual forma, PEN-Nicaragua destacó que la muerte de Bermúdez es "un llamado de atención ante la imparable ola de muertes y contagios causados por el coronavirus en Nicaragua, en medio de la indolencia del gobierno de Daniel Ortega que se empeña en negar la enfermedad y que no sólo ha rechazado decretar medidas de aislamiento social, sino que ha promovido actividades masivas que propician el contagio de miles de nicaragüenses".
En su afán de politizar esta pandemia, "el Gobierno ha ordenado alterar los diagnósticos para ocultar las muertes por covid-19 y registrarlas como “neumonía atípica”, “tromboembolismo” y otras patologías, mientras amenaza a los familiares de los fallecidos y al mismo personal de salud para que no revelen la causa verdadera de cada deceso", continúa el documento de PEN-Nicaragua.
Según el Ministerio de Salud, Nicaragua registra 759 casos y 35 muertos por la pandemia. Sin embargo, el independiente Observatorio Ciudadano COVID-19 cuenta al menos 2687 casos, con 598 fallecidos.
Periodista Emiliano Chamorro internado
También la mañana de este 27 de mayo, familiares del periodista Emiliano Chamorro Mendieta, confirmaron que fue diagnosticado con serios problemas en sus pulmones debido a la covid-19. Chamorro, del medio digital Portavoz Ciudadano, fue internado de emergencia después de que una placa de tórax confirmara el deterioro de su salud.
"A todos los periodistas que se cuiden por favor, que se protejan. A veces nos damos de los fuertes, a veces queremos ser de hierro pero no, somos vulnerables", dijo el periodista Emiliano Chamorro a La Prensa, donde laboró por quince años, hasta febrero de 2020.
Loas hijas de Chamorro solicitaron ayuda para cubrir los gastos médicos de su padre. "Necesita una atención urgente, ya que su caso es delicado. Necesitamos de tu ayuda para poder cubrir sus gastos, ya que los costos son muy altos", escribió en Facebook su hija Martha Chamorro.
El Gobierno de Nicaragua ha recibido múltiples críticas por su forma de manejar la pandemia, ya que el régimen de Daniel Ortega se niega a establecer restricciones e implementar medidas de prevención, con el argumento de que la economía no se puede detener. Además, acusa a los periodistas independientes de crear noticias falsas, y promueve aglomeraciones, a las que asisten los sandinistas, quienes luego son enviados a visitas casa por casa.
La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, dijo ayer que, “en lugar de amenazar a periodistas o acallar las críticas, los Estados deberían alentar un debate saludable sobre la pandemia y sus consecuencias".
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