15 de agosto 2021
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Dos obispos de la Conferencia Episcopal de Nicaragua se pronunciaron este domingo contra el abuso de poder. El Obispo Auxiliar de Managua, Monseñor Silvio Báez, demandó este domingo el fin de la represión, mientras cuestionó con dureza a “autoritarismos irracionales”, en alusión a la pareja presidencial de Nicaragua que desató una escalada de represión contra la oposición y los medios de comunicación desde mayo pasado.
El viernes 13 de agosto, el régimen asaltó las instalaciones del diario La Prensa, el más antiguo del país, saqueó sus instalaciones y detuvo a su gerente Juan Lorenzo Holmann Chamorro, después que la Fiscalía y la Policía abrieron una investigación por supuesto lavado de dinero y defraudación aduanera, respaldados por el presidente Daniel Ortega que los condenó previamente y se sumó a la campaña de desprestigio liderada por los medios oficialistas.
“Basta de palabras de odio que dividen y hieren. Basta de autoritarismos irracionales que pretenden crear sociedades de pensamiento único, donde disentir es un delito. Basta de acciones represivas que impiden la libertad de expresión y atropellan los derechos humanos. Una sociedad no se puede construir sobre el irrespeto y el despojo de la dignidad y la libertad de las personas, ni sobre agresiones y allanamientos”, dijo Báez en su homilía dedicada a la Asunción de la Virgen María, la que fue transmitida en redes sociales desde la parroquia de Santa Agatha en Miami, Florida, Estados Unidos.
Las declaraciones del obispo carmelita, quien salió del país en abril de 2019 por orden del Papa tras amenazas de fanáticos sandinistas, se conocen dos días después que Ortega justificó el golpe a la libertad de expresión que significa la intervención de La Prensa y mientras el Gobierno mantiene una campaña sostenida contra la Iglesia Católica, a la que el régimen cuestiona por respaldar a las víctimas de la represión estatal en abril de 2018.
Ortega llamó “curas del demonio” a los sacerdotes en su discurso, mientras la vicepresidenta y primera dama Rosario Murillo los criticó en un tono similar posteriormente. Sin embargo, la jerarquía católica no se ha dejado amedrentar. En días recientes, la Arquidiócesis de Managua, presidida por el Cardenal Leopoldo Brenes sostuvo que no hay condiciones para la celebración de elecciones el próximo siete de noviembre, las que se realizan en un contexto marcado por la represión y la detención de 33 personas, entre líderes de la oposición, siete precandidatos presidenciales, campesinos, estudiantes, y ahora en ese grupo está el gerente del diario La Prensa.
CEN observa “momentos de incertidumbre”
En su homilía, Báez habló sobre la figura de la Virgen María, mientras la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) consagró al país al “inmaculado corazón” de la madre de Dios este domingo.
En una oración, que puede leerse en la cuenta de Facebook de la CEN, los obispos dicen: “A ti Purísima, Señora, consagramos nuestra patria Nicaragua, en estos momentos de incertidumbre. Toma a Nicaragua entre tus manos y acógenos en tu corazón. Ayúdanos a saber dialogar entre nosotros, a luchar por la dignidad de todos los seres humanos, a no dejar de tener hambre y sed de justicia, a ser hombres y mujeres tolerantes y constructores de paz”.
En el texto de su homilía, Báez recordó que María sufrió exilio cuando debió salir a Egipto, con todo lo que ello significa “incomodidades, inseguridad y pobreza”. “No podemos dejar de pensar en tantas personas que han abandonado su tierra para poner a salvo su vida frente a poderes despóticos y represivos”, afirmó el jerarca católico.
“Nuestro pueblo se parece mucho a la Virgen María porque no se cansa de caminar. Aun en medio del miedo y la incertidumbre, cargando su pobreza y padeciendo la injusticia, nuestro pueblo camina siempre. Por eso nuestra gente ama tanto a María y la siente cercana mientras camina por la vida. La Virgen nos enseña que hay que caminar con el corazón lleno de esperanza y con la confianza puesta en Dios”, explicó.
Para Báez, la figura de María enseña a encontrarse para forjar relaciones humanas y respetuosas. Cada domingo, mientras oficia la eucaristía, el obispo nicaragüense invita a no perder la esperanza, aunque Nicaragua viva circunstancias difíciles desde 2018, cuando producto de la represión estatal fueron asesinadas 328 personas, 2000 resultaron heridas y más de 100 000 se vieron obligados a dejar el país para resguardarse, de acuerdo con organismos internacionales. Sin embargo, el régimen de Ortega sostiene, sin pruebas, que fue víctima de un intento de “golpe de Estado” y llama “terroristas” a los opositores que pidieron su renuncia pacíficamente.
Monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa, ofició misa desde Ocotal, al norte del país. //Foto: Archivo
Álvarez: “No nos robarán nuestros anhelos de paz”
Por su parte, el Obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador Apostólico de la de Estelí, Monseñor Rolando Álvarez, dijo que se debe tener confianza en Dios para lograr construir “una nueva Nicaragua”, según reportó el medio matagalpino Mosaico.
Para Álvarez, el país vive momentos trágicos, “de lucha encarnizada entre el bien y el mal, que, como el dragón infernal, quiere acabar con todo lo que encuentra a su paso, que se enciende de furia y de ira ante todo aquello que represente un signo de esperanza, es una fuerza descontrolada y aparentemente devastadora, infernal, que con su cola quiere barrer con la historia, imperar e imponerse en la historia, cerrando toda puerta o ventana de esperanza”, sostuvo Álvarez.
“No nos robarán nuestros anhelos de paz, justicia y libertad”, dijo el obispo Álvarez. “Hoy nos subimos a los tejados para gritar sin miedo que el pueblo nicaragüense está vivo y seguirá vivo, porque es un pueblo que cree, que lucha; que trabaja por su dignidad, gritar sin miedo que, porque somos dignos, somos libres, y que porque somos libres no tenemos miedo”, expresó el jerarca católico durante la eucaristía que ofició en la parroquia Nuestra Señora de la Asunción en la ciudad de Ocotal, ubicada a 226 kilómetros al norte de Managua.
Brenes: Nicaragua vive "momentos bastante difíciles"
El cardenal Leopoldo Brenes, afirmó este domingo que el país vive “momentos bastante difíciles” en distintos ámbitos, incluyendo el político, el social y el internacional, cuando faltan menos de tres meses para las elecciones del 7 de noviembre próximo, en las que Ortega busca una nueva reelección.
“Nuestra patria está viviendo momentos bastante difíciles, ya sea a nivel político, a nivel social, a nivel económico, a nivel de las familias, a nivel internacional”, dijo Brenes, durante una de las pocas misas que ha oficiado en la Catedral de Managua desde que la pandemia de la covid-19 fue detectada en el país en marzo de 2020.
“A ti, Purísima Señora, consagramos nuestra patria, Nicaragua, en estos momentos de incertidumbre. Toma a Nicaragua entre tus manos y acógenos en tu corazón. Ayúdanos a saber dialogar entre nosotros, a luchar por la dignidad de todos los seres humanos, a no dejar de tener hambre y sed de justicia, a ser hombres y mujeres tolerantes y constructores de paz”, dijo el cardenal.
Brenes también pidió que “los nicaragüenses podamos construir un futuro digno para todos, en donde la diversidad sea una riqueza y en donde podamos construir la paz como fruto de la justicia”.
Con información de EFE.
