13 de julio 2021
El Ministerio Público citó al doctor José Luis Borgen para indagar y corroborar detalles sobre una consulta médica y constancia de reposo por 15 días, que extendió a la aspirante presidencial, María Asunción Moreno, quien fue citada por la misma entidad este pasado lunes, pero no asistió.
Borgen, después del interrogatorio de dos horas, explicó que él atendido de forma presencial a Moreno, el pasado sábado 10 de julio. "Estaban haciendo la indagación más que todo porqué la atendí yo, y porqué le mandé una constancia de reposo por 15 días; prácticamente, estaban comprobando todo eso", expresó.
El galeno les explicó que la constancia de reposo se debió a una infección de las vías urinarias, pero además debió entregar una copia del expediente de la aspirante presidencial y a la vez, su paciente. "Uno tiene que cooperar y dar prueba de todo lo que uno dice (...) Me obligaron a traer el registro y ya se los entregué".
Par Borgen, se violó la "confidencialidad de médico- paciente", ya que en la citatoria especificaba que debía presentar el comprobante del padecimiento de la doctora Moreno y explicarlo. "Si el Ministerio Público nos está citando para hablar de las enfermedades de los pacientes es probable que muchos pacientes no quieran acudir a los médicos independientes".
Borgen comentó que la Fiscalía le advirtió que puede citar a cualquier persona y si se niega, podría caer en una ilegalidad. Posteriormente, le preguntaron cómo se realiza el ejercicio médico y después, le hicieron cuestionamientos específicos sobre Moreno.
Asimismo, dijo que le pidieron un nombre de contacto de la doctora Moreno, pero les explicó que esa persona estaba fuera del país.
La Policía Nacional montó este martes una fuerte vigilancia afuera de la vivienda de Moreno, ubicada en una zona residencial de Managua. Según informó el diario La Prensa, la especialista en Derecho Penal, no se encuentra en su casa. CONFIDENCIAL ha intentado comunicarse con Moreno desde este lunes, pero no ha obtenido respuestas.
No descarta una nueva cita
Borgen es el primer médico citado por la Fiscalía en un contexto de recrudecimiento de la represión gubernamental y de amenazas directas, por parte de fanáticos del orteguismo y la misma vicepresidenta, Rosario Murillo, contra periodistas y trabajadores sanitarios independientes, que han denunciado el manejo antojadizo, por parte del Ministerio de la Salud (Minsa), de la pandemia de covid-19.
El galeno dijo que, durante su entrevista, no hubo referencia sobre la pandemia, pero no descarta que pueda ser nuevamente citado o incluso, implicado en algún tema relacionado. Recordó que la función de los médicos es una labor de defensa de los derechos humanos y de la salud, que a la vez, es un derecho del pueblo.
Destacó que sus valoraciones independientes sobre la emergencia sanitaria, buscan generar una reflexión para que el Gobierno haga una mejor gestión, y por ejemplo, "priorice la vacunación contra el coronavirus al personal sanitario, que sigue padeciendo contagios y fallecimientos por la covid-19".
"No sabemos si esto también es un asunto de intimidación porque es lo que sigue -la persecución contra médicos- y además está preanunciado. Lo anunció la misma vicepresidenta de la república", expresó.
Murillo advirtió, el pasado miércoles, a los periodistas independientes que de estar publicando “noticias falsas” sobre temas de Salud, con información de “falsos médicos y con falsos pronósticos”, lo cual podría ser castigado con la Ley Especial de Ciberdelitos, conocida como “Ley Mordaza”.
Persecución y vigilancia
El médico Borgen confirmó que, nuevamente, su casa ha estado bajo la vigilancia de vehículos de supuestos policías de civil, que se mantuvieron hasta la medianoche de este lunes. Asimismo, al trasladarse a la cita en la Fiscalía fue seguido por motorizados, que también considera son policías encubiertos.
Borgen ha vivido el asedio policial y de fanáticos del Gobierno. En febrero, dos motorizados lo agredieron mientras esperaba en su vehículo ingresar a la rotonda La Virgen, en Managua. Los sujetos le gritaron “golpista” al momento que lo golpearon con un objeto que el galeno no logró identificar, y le provocó una herida superficial de unos cinco centímetros.
La primera agresión ocurrió en noviembre de 2019, cuando evaluaba el estado físico de madres de presos políticos, que habían decidido iniciar una huelga de hambre en la Catedral de Managua, en demanda de la libertad de sus hijos. Lo golpearon y le robaron el celular. Ese mismo día, fue secuestrado por sujetos encapuchados, quienes lo retuvieron por más de 24 horas.
Borgen fue despedido del hospital público Antonio Lenín Fonseca, por atender a los heridos del estallido social de abril de 2018.