5 de julio 2021
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El general en retiro Humberto Ortega Saavedra, exjefe del Ejército Nacional, aseguró que los opositores detenidos por el régimen de su hermano Daniel Ortega, “no son terroristas” o “traidores a la patria”, tal y como los ha calificado el Gobierno sandinista.
“Estoy claro que estos que están detenidos no son terroristas, no han atentado en contra de la estabilidad del país; simplemente son opositores que tienen su punto de vista como yo lo tengo”, dijo el excomandante sandinista en el programa Oppenheimer Presenta, de la cadena internacional CNN en Español y dirigido por el periodista Andrés Oppenheimer.
“Yo he criticado con toda firmeza y respeto al Gobierno actual por eso yo podría ser catalogado de terrorista o traidor a la patria”, añadió Ortega.
En el marco de la crisis de 2018, el general en retiro se posicionó a favor de adelantar las elecciones de 2021, y el desmantelamiento de los paramilitares, para encontrar una salida a la situación del país. En diciembre de 2019, Humberto le pidió a su hermano Daniel liberar a los al menos 168 opositores que, en ese momento, estaban detenidos por manifestarse contra el Gobierno.
En respuesta, el presidente Ortega acusó —en 2018— a su hermano menor de ser un peón de la “oligarquía” y del “imperio”, en alusión al gran capital y a Estados Unidos. En esa ocasión, el mandatario dijo que tras la derrota electoral de los sandinistas, en 1990, cuando él también gobernaba, su hermano “simplemente decidió pasarse al lado de los que habían ganado las elecciones y convertirse en un peón de la oligarquía y del imperio”.
“Todavía no son candidatos”
En las últimas cinco semanas, el régimen ha encarcelado a 21 dirigentes opositores, entre precandidatos presidenciales, empresarios, activistas, exguerrilleros y periodistas. En 18 de los casos, la Fiscalía General ha acusado a los ciudadanos de infringir la Ley 1055 o Ley de Defensa de los Derechos del Pueblo a la Independencia, la Soberanía y Autodeterminación para la Paz, mejor conocida como “Ley de Soberanía” o “Ley Guillotina”, que establece la figura de “traidor de la patria”.
Los precandidatos detenidos son: Arturo Cruz, Juan Sebastián Chamorro, Félix Maradiaga, Miguel Mora y Cristiana Chamorro Barrios; esta última guarda arresto domiciliario, mientras el resto ha sido llevados a las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocidas como “el nuevo Chipote”.
El general en retiro comentó específicamente que estos cinco detenidos son “una serie de personeros políticos que todavía no son candidatos, pero que quieren serlo”.
En una de sus últimas apariciones públicas, el presidente Ortega justificó las detenciones bajo el argumento de que “no eran ni precandidatos ni de su propio grupo, mucho menos que fueran precandidatos presidenciales. Eso nunca existió. Que quede claro que aquí no estamos juzgando a políticos, ni candidatos, sino que se está juzgando a criminales que atentaron en contra del país”.
Humberto Ortega sugirió que a estos 21 recién detenidos y a los más de 120 presos políticos del régimen —arrestados en los últimos dos años— se les otorgue la figura de arresto domiciliario. “Lo mínimo que se puede hacer es que todos estos detenidos últimos y también los primeros estén en casa por cárcel, mientras se realiza una investigación, y superar (así) todos los obstáculos que han habido para que se monten unas elecciones más o menos aceptables”.
“Siempre he hecho énfasis en que los nicaragüenses estamos en una sociedad muy dividida, muy polarizada, porque no hemos podido todavía forjar ese cauce por la democracia y desde 2018 se ha vuelto más complicado”, subrayó el que fuera comandante en jefe del extinto Ejército Popular Sandinista (EPS), de 1979 a 1995.
