15 de junio 2021
El expresidente de Nicaragua, Enrique Bolaños Geyer, de 93 años de edad, falleció cerca de la medianoche de este 14 de junio, según confirmó su familia a través de una publicación en la fanpage de la Biblioteca Enrique Bolaños, la organización sin fines de lucro fundada por el exmandatario para "recopilar, preservar y divulgar información política, cultural, jurídica e histórica" para los nicaragüenses. El exmandatario ya había tenido complicaciones previas de salud a finales de agosto de 2020. El comunicado familiar fue firmado desde la residencia del expresidente en El Raizón, Nindirí.
Bolaños estaba alejado de la política desde inicios de 2007, cuando dimitió formalmente en febrero de ese año como diputado constitucional ante la Asamblea Nacional, argumentando “razones muy personales”. El exmandatario ya había criticado entonces la asignación de una diputación constitucional al presidente saliente, que resultó del pacto de finales de la década de los noventa entre Arnoldo Alemán y Daniel Ortega.
"Con profundo dolor la familia del ingeniero Enrique Bolaños Geyer, expresidente de la República de Nicaragua, comunica el sensible fallecimiento de su amado padre, abuelo y bisabuelo, acaecido a las once y cinco de la noche de ayer catorce de junio", indicó la familia.
"Por las condiciones actuales agradecemos que desde sus hogares nos acompañen con una plegaria al Creador por su eterno descanso", indicó la familia, en relación a la pandemia de covid-19. Y agregó: "Sabemos que en otros tiempos nos acompañarían a darle el último adiós, sin embargo él, desde su quebranto de salud, llamó siempre a la prudencia y al cuido".
La familia no precisó la causa de muerte. Sin embargo, la salud del mandatario, quien cumplió 93 años en mayo pasado, estaba "quebrantada" desde agosto de 2020, y permanecía en casa bajo estricto cuidado médico. El pasado 4 de junio, también a través la fanpage de la Biblioteca Virtual, se publicó una fotografía con la confirmación de su primera dosis de la vacuna Sputnik contra la covid-19.
A Enrique Bolaños se le recuerda como un antisandinista “tenaz” desde su presidencia en el Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) entre 1983 y 1988, durante parte del primer gobierno del FSLN. En aquellos años, fue arrestado en un par de ocasiones y en 1985 le confiscaron todo su patrimonio familiar.
Décadas más adelante, en 2020, Enrique Bolaños criticó al Cosep por su papel frente al régimen de Daniel Ortega, cuando aprobó decenas de leyes ‘por consenso’, alegando que ese Cosep “no se parece en nada” al que él presidió 40 años antes.
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Tras la confiscación de su patrimonio, Bolaños trabajó como programador de computadoras hasta el 4 de octubre de 1995, cuando se convirtió en jefe de campaña de la entonces Alianza Liberal (AL) y siete meses después, el 8 de mayo de 1996, fue electo compañero de fórmula presidencial de Arnoldo Alemán, por el Partido Liberal Constitucionalista (PLC).
En política, Bolaños venció dos veces al actual presidente y eterno candidato del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), Daniel Ortega. Primero en las elecciones de 1996, en las que fue vicepresidente en el Gobierno de Arnoldo Alemán, y luego como presidente para el periodo 2002-2006. Sin embargo, reclamó que Alemán y Ortega no lo dejaron gobernar.
El destape de la “huaca” y la ruptura con Alemán
En agosto de 2002, con menos de un año en la presidencia, Bolaños acusó a su antecesor y excompañero de fórmula, Arnoldo Alemán, de “lavar” cerca de 100 millones de dólares de diferentes entidades públicas. El caso fue conocido como “la huaca”, uno de los mayores escándalos de corrupción en la historia de Nicaragua.
“Arnoldo si me estás viendo debo decirte que estoy triste, dolido y desilusionado al ver las pruebas irrefutables y contundentes que señalan al expresidente de la República como autor y cómplice de haber cometido semejante delito con los pocos reales del pueblo de Nicaragua”, lamentó Bolaños después de presentar la acusación.
Alemán enfrentó cargos de corrupción y fue condenado a 20 años de cárcel, pero luego fue absuelto por la justicia orteguista. Se señaló que, a cambio, Alemán cedió a Ortega del control del Poder Legislativo y Ortega le exoneró de cualquier responsabilidad en juicios investigados y en futuros procesos judiciales que se pudieran iniciar.
El destape de la huaca fue el inicio de una Administración llena de tormentos para el exmandatario ahora fallecido. Alemán, quien calificó a Bolaños como “ingrato” y “traidor” por las acusaciones, pulió su alianza con Ortega, desatando una pugna entre el Ejecutivo y la Asamblea Nacional. Al finalizar el Gobierno de Bolaños el país se encontraba en un impasse y el Gobierno tuvo que recurrir a la mediación de la Organización de Estados Americanos (OEA), invocando la Carta Democrática Interamericana.
La crisis política entre 2005 y 2006 se puso entre paréntesis ante la proximidad de las elecciones de 2006, con un parche legislativo: la aprobación de la Ley Marco para la Estabilidad y Gobernabilidad del País, que suspendía la aplicación de las reformas constitucionales, que meses antes habían aprobado el PLC y el FSLN en la Asamblea Nacional. Estas reformas le restaban poderes y atribuciones al presidente.
Pese a los tropiezos en política, la gestión del expresidente Bolaños se destacó por la aprobación del Tratado de Libre Comercio de Centroamérica con Estados Unidos (CAFTA), la creación de zonas francas, la promoción de inversión en el agro mediante el “plan de libra por libra” y en el perdón del 80% de la deuda externa del país.
Enrique Bolaños Geyer: Autor, productor y programador
Retirado de la política, el expresidente dedicó sus últimos años a la Biblioteca Virtual Enrique Bolaños, una iniciativa que busca rescatar la memoria histórica de Nicaragua, programada y desarrollada por él mismo. También dedicó tiempo a escribir artículos de opinión, libros, y a cuidar de su familia.
Como escritor, la obra más destacada del expresidente fue el libro La lucha por el Poder, publicado en 2017, en la que narra la historia política de Nicaragua, desde 1821 hasta 2007, y también una memoria de su actuación como protagonista, cuando le correspondió ejercer la presidencia.
Enrique Bolaños también escribió diversos artículos y publicaciones, entre ellos: “¿Cómo vamos? – algunos indicadores económicos ilustrados” (1982); “Memorándums de la presidencia” (1985-86); “Nicaragua: 165 años de vida independiente” (1987); la columna: “Ideas para todos” (1983-84); “Nicaragua 1984 - economía” (1984); “El pequeño raterito” (1988); “La guerra antiimperialista” (1986); y “El plan azul y blanco” (1989).
El interés del exmandatario en la economía nació hace más de medio siglo. Durante su juventud, Bolaños trabajó en varias empresas en Masaya, León y Managua, pero a inicios de la década de los años cincuenta, los altos precios del algodón motivaron a él y sus hermanos, Alejandro y Nicolás, a sembrar este producto. Con el tiempo, el negocio familiar se consolidó como el Grupo BOLAÑOS-SAIMSA, y llegó a ser la empresa algodonera agroindustrial más grande del país, hasta que en 1985 el régimen sandinista les confiscó todo.
La pérdida del patrimonio familiar significó un nuevo comienzo para Bolaños, quien era ingeniero industrial graduado en Saint Louis University, en Saint Louis, Missouri, Estados Unidos. Luego, aprendió programación de computadoras y durante una década así se ganó la vida y mantuvo a su familia hasta que incursionó en la política, y se retiró de ella para volver a sus negocios tras concluir su período presidencial.