8 de mayo 2021
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Sin ninguna base legal, el Ministerio de Educación (Mined), a través de la delegación departamental de Juigalpa, despidió a la maestra de primaria María Karina Vado Gadea, quien asegura que las razones son de tipo “político”: “simplemente porque no soy sandinista”, expresó la docente, con 24 años de experiencia.
La carta fue entregada este viernes por la responsable de recursos humanos de la delegación del Mined de Juigalpa, Ada Verónica Bonilla, en presencia de Ana María Suazo, directora de la escuela “Enrique Tierno Galván”. La maestra trabajaba en ese centro escolar desde el 2012.
Vado reclama la falta de argumentos legales en su despido, ya que la carta indica en dos líneas: “sirva la presente para informar a usted que a partir de la fecha prescindimos de sus servicios ante nuestra institución”. La maestra valora la decisión del Mined como “injusta”, por lo que no firmó la carta.
Asegura que luchará para que se respeten sus derechos laborales.
“Yo les dije: 'de la Ley de Carrera Docente' qué artículo me van aplicar, en qué he fallado. No me están aplicando nada. Es más, eso no tiene validez”, reclamó Vado Gadea.
La respuesta de la responsable de recursos humanos fue que “quisiera o no, estaba despedida”. Mientras tanto, la directora le dijo que no asista el próximo lunes 10 de mayo, porque su entrada al centro escolar está prohibida, que esa es la orden y que el “despido era efectivo”.
Carta de despido por parte del Mined, entregada a la profesora María Karina Vado Gadea, con 24 años de experiencia.
Foto: cortesía
A la vez, la docente denunció el acoso policial que padeció la escuela durante la mañana de este viernes. Una patrulla, integrada por agentes antimotines y de manga celeste, rodearon el centro. La maestra consideró que es una forma de intimidación, que forma parte del acoso que desde el centro, ejercían las autoridades en su contra, al estar pendientes de todos sus movimientos.
Los despidos de docentes aumentaron desde 2018, cuando muchos de ellos se sumaron a la lucha cívica. Expulsarlos de las escuelas, ya sea primaria, secundaria o universidad, ha sido un mecanismo de represalia política que el régimen orteguista ha implementado contra cualquier maestro que no concuerde con su ideología y cuestione el sistema. No importa cuántos años de experiencia pueda tener la persona, si la orden ha sido dada.
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Según la Unidad Sindical Magisterial (USM) de abril de 2018 a mayo 2021, 139 docentes fueron despedidos. Estos maestros no se plegaron a lo que ordenaba el Gobierno a través del Mined o las Universidades. A muchos se les calificó de “traidores, terroristas y delincuentes” por apoyar a los estudiantes en las protestas; algunos tuvieron que exiliarse debido a las amenazas en su contra, indica el grupo sindical.
