8 de abril 2021
AA
Share
El niño nicaragüense de diez años cuya imagen se ha vuelto viral simbolizando la actual crisis humanitaria en la frontera sur de Estados Unidos fue abandonado por coyotes el pasado primero de abril, confirmó un portavoz de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés).
“Escenas como esta son muy comunes, los traficantes de personas siguen abandonando niños en zonas desoladas”, agregó el vocero en una declaración ofrecida a los medios estadounidenses. Ya el niño había dicho en el video, publicado por decenas de medios dentro y fuera de Estados Unidos, que viajaba sin sus padres o familiares. “¿No vienes con tu papá o tu mamá?”, le preguntó el agente que lo rescató. “Nadie. Yo venía en un grupo que venía ‘de entrega’ y al final me dejaron botado y venía aquí a pedir auxilio”, respondió el pequeño llorando.
El portavoz de la CBP advirtió que los “coyotes” no toman en cuenta el bienestar de los niños. “No crea en los traficantes de personas que intentarán decirle lo contrario y pondrán en riesgo a las poblaciones más vulnerables”, aconsejó.
Abandonar niños en la frontera estadounidense es una práctica que se ha vuelto constante. Un traficante lanzó por un muro fronterizo de más de cuatro metros a un par de niñas ecuatorianas de tres y cinco años, cerca de El Paso, Texas, el 30 de marzo. Así quedó registrado en un video grabado por una cámara de seguridad en el que se ve al hombre tirando a las niñas de manera que cayeran en suelo estadounidense.
El 31 de marzo en esa misma frontera, pero del lado mexicano, agentes hallaron entre matorrales a un niño hondureño de cuatro años viajando sin compañía de familiares ni conocidos cerca del río Bravo en Reynosa, Tamaulipas, reportó la agencia Efe.
Se duplicó cantidad de niños migrantes no acompañados
En la frontera entre Estados Unidos y México hay una emergencia humanitaria que crece cada día. A inicios de febrero la administración del presidente Joe Biden dijo que no rechazaría rápidamente a los menores no acompañados por razones humanitarias, lo que significó un cambio en la política de la administración previa de Donald Trump.
Desde entonces, la cifra de personas menores de edad viajando sin acompañantes se duplicó de un mes a otro, para alcanzar en marzo la cifra de 18 990 niños y adolescentes.
La migración irregular en general aumentó también. Si en febrero la CBP retuvo a 100 000 personas intentando cruzar irregularmente, para marzo ese número aumentó un 71%, con 172 000 migrantes que buscaban entrar a Estados Unidos, dijeron funcionarios de Biden que ofrecieron declaraciones sobre la crisis migratoria este miércoles 7 de abril.
Los oficiales del Gobierno estadounidense detallaron que de los 172 000 migrantes expulsaron 103 900, o sea el 60%, y que 28% de esas personas ya habían sido expulsadas antes, por lo que hay una reincidencia alta. “Es, a menudo, la misma gente que regresa”, señalaron.
“El presidente tiene un plan”
Los funcionarios iniciaron la conferencia justificando la actual situación que enfrenta el Gobierno de Biden. “Seguimos saliendo del hoyo que dejó la administración previa”, dijeron, refiriéndose al Gobierno de Donald Trump que concluyó en enero pasado y que ejerció una dura política anti migratoria.
El plan del presidente Biden consiste en varias acciones, una de las más inmediatas y que ya se implementa es la ampliación de capacidades para recibir a los niños migrantes, que en muchos casos se encuentran hacinados en centros de detención cerca de la frontera. Disponer de más camas, abrir nuevos espacios, contar con más personal y voluntarios es parte de la estrategia.
Además, aseguraron que ajustan y crean nuevas políticas que les permitan sacar a los niños rápidamente de los centros de la CBP y lograr el encuentro de los niños con sus familiares o con quienes se hacen cargo de ellos. Pagan vuelos para facilitar las logísticas de viaje y así lograr la reunión, les aseguran a los familiares adultos que, - de ser indocumentados- no tendrán problemas migratorios al presentarse ante las autoridades para recibir a los niños, dijeron.
Luchar contra los traficantes de personas
Los representantes del Ejecutivo enfatizaron que necesitan de la ayuda del Congreso para crear nuevos castigos y luchar contra los “coyotes” o traficantes de migrantes y contra las organizaciones que se aprovechan de quienes viajan hacia el norte.
Los “coyotes” convencen a los migrantes de enviar a sus niños solos, sobre todo desde que ocurrió el cambio de la política estadounidense sobre menores de edad no acompañados: “Es bueno aprovechar el momento porque los niños pueden pasar rápido”, dijo un guatemalteco que se identificó como “coyote” a Reuters. “Es lo que le decimos a todo el mundo”, agregó y aseguró que, incluso, han organizado viajes de grupos enteros de niños en las últimas semanas.
Vicepresidenta Harris a cargo de la acción a largo plazo
Biden también ha empezado a desplegar acciones cuyos resultados llegarán después, explicaron durante la conferencia sus funcionarios. “Hemos mandado millones (de dólares) en ayuda humanitaria a Centroamérica para abordar los huracanes, el hambre y la violencia en la región”, destacó una oficial.
La vicepresidenta de Estados Unidos Kamala Harris liderará ese esfuerzo. “La visión a largo plazo es que tratemos las razones por las que la gente viene, la violencia, la pobreza, los desastres naturales, para que las personas puedan quedarse en sus hogares”, agregaron las fuentes oficiales.
Justo este miércoles Harris conversó vía telefónica con el presidente de México Andrés Manuel López Obrador sobre el aumento de la migración irregular hacia Estados Unidos.
Biden además designó a un enviado especial al Triángulo Norte, es decir Guatemala, El Salvador y Honduras, países de origen de la mayoría de migrantes centroamericanos. Se trata de Ricardo Zúñiga, que llegó el lunes 5 de abril a Guatemala y se reunió con el presidente guatemalteco Alejandro Giammattei. Posterior llegó a El Salvador y tenía previsto reunirse con el presidente Nayib Bukele este miércoles 7 de abril, pero el encuentro no se dio, reportó The Washington Post.
Zúñiga realizará labores diplomáticas “para frenar la migración irregular hacia los Estados Unidos e implementar los fondos por 4 mil millones de dólares que el presidente Biden ha dispuesto que se destinen a lo largo de varios años a erradicar las causas de la migración en América Central”, se lee en un comunicado del Departamento de Estado.
Sobre Nicaragua, otro país de origen de los migrantes que llegan a Estados Unidos como el niño abandonado por los coyotes, la administración Biden ha manifestado preocupación “por la creciente represión del Gobierno del presidente Daniel Ortega en Nicaragua", aseguró que Ortega conduce el país hacia una dictadura y demandó un cambio de rumbo hacia la democracia.
Desde el estallido de la crisis sociopolítica en abril de 2018, debido a la represión estatal de las masivas manifestaciones contra el presidente Ortega y a la crisis económica, más de cien mil nicaragüenses han solicitado refugio en distintos países, principalmente en Costa Rica, Estados Unidos, España y otros destinos.
El final de esta creciente crisis migratoria en suelo estadounidense no llegará pronto, así lo advirtieron los funcionarios estadounidenses. “Nadie debería tener la expectativa de que esto se va a resolver de la noche a la mañana”, expresó uno de ellos.
