23 de febrero 2021
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Después de cuarenta días ausente, el presidente de Nicaragua Daniel Ortega aprovechó su primera aparición pública para descartar que la vacuna contra la covid-19, estará "pronto" en Nicaragua. El mandatario se limitó a indicar que "llegará el momento" en que el país pueda acceder a la vacuna, pero que actualmente esta se encuentra "en manos de países poderosos y —claro— es un gran negocio para las empresas fabricantes de vacunas, pueden poner cualquier precio".
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"Más allá de estas medidas, del distanciamiento, del lavado de manos, del tapabocas, la medida que realmente va a venir a protegernos es la vacuna", comentó el mandatario desde una tarima en la Plaza de la Revolución, donde él y su esposa, Rosario Murillo, se presentaron sin mascarilla, saludaron con beso y abrazo a los generales del Ejército, a los altos mandos policiales, a los diputados Gustavo Porras y Maritza Espinales, y hasta tuvieron sesión de fotos con la Juventud Sandinista.
De acuerdo con Ortega, tanto la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la Federación Rusa y la India han expresado su "buena voluntad" de poner a disposición de Nicaragua la vacuna contra la covid-19, pero el problema —en el caso de la OPS— es que "no pueden garantizar que las vacunas van a llegar rápidamente porque primero las están aplicando en los países desarrollados, los que tienen más dinero para comprar y entre ellos mismos se disputan la compra de la vacuna", dijo.
"Nosotros tenemos fondos disponibles para poder comprar esas vacunas", destacó Ortega. Sin embargo, "habrá que ver las condiciones que se van dando para que países como el nuestro puedan acceder a la vacuna. Estamos seguros que llegará el momento en que vamos a acceder a la vacuna", agregó el mandatario durante el acto en conmemoración del 87 aniversario del asesinato de Augusto C. Sandino, que fue transmitido en cadena de radio y televisión.
Daniel Ortega pide que cesen las sanciones
Ortega aprovechó también su intervención para pedir al Gobierno de Estados Unidos que cese las sanciones contra Cuba, Nicaragua y Venezuela, y abogó por un diálogo entre todas las naciones para combatir juntos la pandemia de la covid-19.
"Cuanta falta hace en estos momentos (de pandemia) un alto al fuego de todo tipo de agresiones en todas las naciones del mundo porque estos tiempos que estamos atravesando son tiempos de cambios profundos", dijo el mandatario.
El mandatario cuestionó —una vez más— a Estados Unidos por presentarse como "la nación más respetuosa de los derechos humanos, el país más puro y limpio del planeta", cuando, a su juicio, son "bárbaros" y "terroristas".
"¿Dónde están los bárbaros?, ¿Dónde están los terroristas?. Están en Washington, están en Washington los bárbaros y terroristas y ya sabemos la larga historia de los Estados Unidos", señaló Ortega, que mencionó el lanzamiento de las bombas atómicas en Hiroshima y Nagasaki.
Ortega insistió en el cese de las sanciones a la Venezuela de su homólogo y aliado Nicolás Maduro, y a Cuba. "No dejaremos de clamar, como lo hacíamos en todas las conferencias, que cesen las sanciones contra Venezuela y contra el pueblo hermano de Cuba", añadió.
Para el mandatario nicaragüense, "en estos tiempos" las naciones tienen que unirse "a nivel global" para enfrentar temas como la pandemia. "Que no se olviden los Estados Unidos que en este planeta nadie sobra, por eso es importante dialogar, llegar a acuerdos", instó.
Abogó para que Estados Unidos y la Unión Europea, "en estas condiciones, cobrar conciencia" y no "seguir actuando como han continuado actuando en medio de la pandemia, tirando patadas con sanciones, con actitudes hegemonistas".
"Eso es lo que tienen que hacer ahora las potencias en el mundo: busquen puntos de aproximación para que podamos salvar a la humanidad, porque aquí no se trata de auxiliar a países mas empobrecidos porque el problema es global, de lo contrario ahí estarán los virus de un lado para otro moviéndose, trasladándose", anotó.
