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El 2021, ¿será tan malo “a como” el 2020?

Usemos mejor nuestro castellonahualt. La preposición a, los españoles la utilizan en donde nosotros nos la comemos.

Usemos mejor nuestro castellonahualt. La preposición a

Onofre Guevara López

5 de enero 2021

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Si aún no hemos podido contra la dictadura, comencemos por liberarnos de escribir “a como” en medios impresos y de decirlo por la televisión. Ya libres del error, usemos el adverbio como, sin la preposición a.

Lo pienso y lo digo, arriesgando que se me otorgue el calificativo de sabihondo. Pero solo trato de que nuestros amigos no sean quienes se ganen otro calificativo menos elegante por no molestarse en usar mejor nuestro castellonahualt.

No digo nuestro idioma castellano, sino nuestro castellonahualt, por lo que todos sabemos: el castellano fue impuesto por los colonizadores.  Lo bueno, es que ese idioma lo utilizamos con libertad, lo que no significa que podemos atropellarlo como ellos atropellaron la cultura de nuestros antepasados.

La preposición a, los españoles la utilizan en donde nosotros nos la comemos. Un ejemplo: ellos dicen “voy a por el pan a la panadería”, y nosotros vamos a la panadería, pero solo “vamos… por el pan”. Es decir, omitimos la a, incorrectamente… pero el pan nos sabe igual.


Ya curado en salud, como pienso estarlo (no “a como pienso”), vamos a ver que feo suena cuando ponemos la a en donde no se necesita.

Lo que sigue y todo lo que pueda leer al respecto en mi mataburro, tiene la única intención de sentir que, si estoy leyendo, me están enseñando algo, y a quien esté oyendo le suene mejor su voz cuando me está informando.

Aún más, es agradable el buen uso de la a en la conversación formal, así como (no “a como”) también en lo coloquial. El adulto puede corregir y enseñar a los menores porque, al parecer, en la escuela pública, los chavalos que pueden ir a una escuela, no reciben la mejor información respecto al lenguaje elemental.

Pienso entonces, que la tarea correctora es de los viejos, porque en la escuela pública de ahora ningún muchacho debe ser aplazado, así no haya tenido la disciplina de asistir a clases. ¿Cuál es el motivo de esa orden de Rosario primera y única voz del gobierno? Que no se ponga en duda la falsa estadística oficial sobre la cantidad de escolares aprobados, ni se dude de la calidad de la educación.

Es imposible mencionar cuántas veces se escucha y se lee cada día el tal “a como” en los noticieros televisivos, en los periódicos y en artículos de fondo (y hasta en los sin fondo). También sería grosero mencionar por su nombre a quienes lo dicen o lo escriben. Además, en cierta forma, sería como tirar la piedra para arriba y luego nos caiga en la cabeza, porque de los errores solo se salvan los mataburros… y a veces tampoco ellos.

Y pienso que no hay quien no cometa alguna cagadita en su vida, y no por asunto de brutalidad, sino por la genialidad del idioma castellano, del castellonagualt y de todos los idiomas creados, utilizados y desarrollados con y por la sabiduría de los pueblos de todo el mundo.

Quizás esté perdiendo el tiempo, pero si quiere, échele la culpa al año viejo, que lo merece por todo lo malo que en ese lapso nos hicieron la pandemia y los dictadores.

Como ya lo ofrecí (no “a como” ya lo ofrecí) me pongo a leer en mi mataburro, y dice que la a es una preposición, adverbio y, como lo sabe todo el mundo (no “a como” lo sabe), la primera letra del alfabeto castellano, y que tiene las siguientes funciones:

1) Expresa la idea de movimiento material o figurativo (voy a seguir caminando); 2) introduce el complemento indirecto (escribo una carta a mi hijo); 3) introduce el complemento directo de persona del verbo (quiero a mi madre); 4) introduce distintos complementos circunstanciales (todos iremos a Granada); 5) introduce los complementos del adjetivo (oponerse a la dictadura es útil a nuestras libertades públicas).

Disculpen mi necedad de reiterar el asunto, pero como ya se vio (no “a como” ya se vio), nadie puede ir “a como” porque Como no es un lugar a donde se pueda ir, sino también un adverbio que: 1) expresa idea de equivalencia, semejanza e igualdad (se oye como una de las homilías Rosario); 2) expresa el modo de suceder o de ser de algo (como lo dijiste ayer).

Según el mismo diccionario, Como es una preposición necesaria en, por ejemplo: asistiré a una boda, o iré a cualquier otra parte.

Sigo con mi necedad, y la parte final de esta columna será con el adverbio Como

Al margen de estas cuartillas

*Si este nuevo año 2021 nos irá tal mal como nos fue el 2020, y tan malo como fueron el 2018 y el 2019, dependerá más de nosotros que de los dictadores…

*Como todo dictador, el “nuestro” se siente jinete y piensa que al pueblo puede jinetear por siempre; pero hay que ser caballo para pensarlo, porque el pueblo lo puede botar votando…

*Porque, como decía el poeta Manolo Cuadra: Suceda lo que suceda la dictadura caerá…y cayó, pero antes Rigoberto López Pérez, calló a su fundador.

*Pero, así como está de renuente el liderazgo de la oposición para unirse, los caídos y los callados seguirán siendo los opositores de a pie…

*Así como hay líderes amantes de las libertades individuales y la liberación del país, deberían amar liberarse del discurso político “americano”… porque si no, la liberación del país tampoco será posible.

*Hay líderes que, como no parecen olvidar que el fin único no es quitar a una dictadura fortalecida con dinero venezolano, se les debe recordar que tampoco es para tener gobiernos orientados… hacia y desde la embajada estadounidense.

*Los dictadores, están como en un callejón sin salida: no quieren reformar lo que han deformado, porque quieren hacer otro fraude; pero así perderán el poder de ejecutarlo…

*Un fraude más, significaría el caos, lo cual sería como definirse a favor de tirarse al abismo del desorden absoluto, situación confusa en la que… ¡solo salen los tiros por la culata!

*Riesgo como ese de caer en el caos es posible evitarlo si los líderes de la oposición hacen la unidad en la acción, a pecho descubierto…

*Eso es como expresarse con sinceridad, porque quien diga que se mete en política absolutamente libre de interés, está mintiendo…

*La clave está en conocerse y que les conozcan tal como son, y hasta dónde llegan sus intereses; luego, dejar el temor y tirar sus nombres al ruedo de las candidaturas…

*Y así, que sean los otros quienes los acepten o los rechacen como candidato, y aceptar lo que piense la mayoría…

*Se requiere sinceridad para ser “potentes”; dejen de estar escondiendo “la bola”; así es cómo, jugando limpio, todos estarían en paz…

*Todos sabemos que la lucha es como una procesión, y nadie participa en ella… sin conocer el nombre del santo.

*Claro que hay quienes desean ser el santo; otros que desean serlo, pero no pueden; y otros que pueden serlo, pero tienen miedo…

*Entonces, ¿cómo hacer? Ahí están las bases, consúltenlas y que ellas decidan quiénes no pueden, aunque lo deseen; o quiénes pueden… aunque ahora digan que no quieren.

*Recuerden: “el tiempo perdido… hasta los santos lo lloran”.

*Y ustedes, líderes de oposición, no son santos… pero pudieran quedar llorando si continúan perdiendo el tiempo.


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Onofre Guevara López

Onofre Guevara López

Fue líder sindical y periodista de oficio. Exmiembro del Partido Socialista Nicaragüense, y exdiputado ante la Asamblea Nacional. Escribió en los diarios Barricada y El Nuevo Diario. Autor de la columna de crítica satírica “Don Procopio y Doña Procopia”.

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