11 de julio 2024
La orden de cierre de Radio María, dictada por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, ocurre porque no habían logrado que cerrara por su cuenta, tras varios intentos de "asfixiar de manera financiera" a la emisora, valora la abogada e investigadora, Martha Patricia Molina, autora del informe: "Nicaragua: Una Iglesia perseguida".
La investigadora comentó en el programa Esta Noche que la emisora ya había reducido el personal y también los horarios de transmisión "producto de la represión financiera".
"Pero como no logró la dictadura que ellos por sus propios medios cerraran (...) hasta que definitivamente se vieron sin alternativa alguna y la clausuraron", insistió.
Para el periodista Manuel Obando, exdirector de los medios de comunicación de la Diócesis de Matagalpa y quien fue desterrado hacia Estados Unidos en febrero de 2023, el cierre demuestra que el mensaje de Dios "es perseguido y siempre causa incomodidades" en Nicaragua porque la emisora se limitaba a transmitir oraciones y misas.
"El cierre era la crónica de una muerte anunciada, de simplemente dejar al pueblo sin acceso a medios de comunicación que no tengan que ver con con la propaganda oficial", detalla.
Desde 2018, la emisora había despedido a su personal por la falta de fondos. También retiraron de su programación los mensajes de monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa, y Silvio Báez, obispo auxiliar de Managua. Ambos líderes católicos han sido obligados a salir de Nicaragua.
Radio María Nicaragua es parte de Familia Mundial, una asociación que agrupa a emisoras del mismo nombre en más de setenta países. La sostenibilidad de las emisoras no depende de ningún tipo de publicidad o de programas de paga, desde sus orígenes buscan el apoyo financiero bajo donaciones de la feligresía católica. Operaba en el país desde 1984, aunque la personalidad jurídica le fue otorgada en febrero de 2000.
Falsa justificación de cierre de Radio María
De acuerdo al MINT, la cancelación de Radio María obedece a que supuestamente “no reportaron” sus estados financieros de los periodos 2019-2023. Además, que tenía la “Junta Directiva vencida desde el 8 de noviembre de 2021”.
"Eso es completamente falso", afirma Molina. Para la investigadora hay evidencia que todas las organizaciones sin fines de lucro "presentan sus documentos a tiempo, pero lamentablemente el Ministerio del Interior no acepta esta documentación, pero tampoco entrega un documento oficial con un sello diciendo por qué no la acepta".
16 medios católicos cerrados en Nicaragua
Tanto la investigadora como el exdirector de los medios de comunicación de la Diócesis de Matagalpa apuntaron que con el cierre de Radio María al menos 16 medios de comunicación católicos han sido cerrados o de alguna forma obligados a dejar de existir.
"Nos hemos dado cuenta que en el interior del país se han visto obligados a cerrar por el tema también de las cuentas bancarias que están congeladas para la Iglesia", argumenta Obando.
Molina dice que quedan "poquitos" medios de comunicación católicos en Nicaragua y valora que "es cuestión de tiempo para que los clausuren completamente".
"La dictadura pretende aniquilar por completo la evangelización y la palabra de Dios, porque saben que están creando conciencia en la población", señaló la abogada.
Golpe a los feligreses
Sobre el impacto para la población tras el cierre de estos medios católicos, el periodista desterrado por la dictadura valora que "es fuerte porque mucha gente vivía la misa, los retiros, la predicación, los consejos de los sacerdotes a través de la radio, la televisión o a través de algunas plataformas sociales".
"Conozco muchos que no pueden ir presencialmente a una parroquia (...) y me dicen cuánta falta les hace. Por otra parte están los hermanos de las comunidades rurales, toda esa gente quedó prácticamente incomunicada de recibir el mensaje del Evangelio, el mensaje de sus parroquias y de sus párrocos", insiste Obando.
Molina coincide que el mayor golpe lo viven las comunidades rurales de Nicaragua, que también están sufriendo quedarse sin sacerdotes que se han visto obligados a salir al exilio forzado.
"Va a ser muy difícil reemplazarlos porque las zonas rurales son de difícil acceso", insiste la investigadora.
Además, Molina indica que las agresiones en contra de la Iglesia católica "se han mantenido", pero en los últimos meses "han habido pocas denuncias" por el temor de la población.